¿Eres de las personas que le ponen sal a la comida incluso sin probarla? De acuerdo con un estudio científico, el consumo elevado del condimento aumenta el estrés, además de contribuir a otros males de salud como la retención de líquidos gracias a las afectaciones del metabolismo.
El estudio publicado en la revista Cardiovascular Research, de la Universidad de Oxford, tuvo como método la administración de dosis altas de sal a ratones, quienes mostraron cambios en su actitud luego de una semana.
La investigación tomó como principal referencia los glucocorticoides (cortisol en humanos), mismos que aumentaron sus niveles basales y permitieron el aumento de estrés luego de una dieta alta en sodio.
El eje Hipotálamo-Pituitaria-Adrenal (HPA) se activó por estresores gracias a un consumo de sal elevado, mismo que influye cuando la persona está en reposo y también cuando se encuentra en un ambiente de estrés.
‘El alto consumo de sal está cambiando al mundo’
Una de las observaciones de la investigación fue el cambio en el comportamiento de los roedores impulsada por los elevados consumos de sal. Este tema, de acuerdo con el estudio, debe analizarse a detalle, ya que podría tener consecuencias en el ámbito social de las personas.
“Esto justifica una investigación sistemática porque los cambios perjudiciales en la salud del cerebro en respuesta a un alto consumo de sal en la dieta pueden tener importantes consecuencias en el mundo real”, argumenta el estudio.
El principal problema con el consumo de sal, de acuerdo con la investigación de la Universidad de Oxford, es que en la mayoría de países las personas superan las recomendaciones de ingesta del condimento, que de acuerdo con la American Heart Association es de 3.75 gramos al día.
“El exceso habitual de sal en la dieta provoca enfermedades cardiovasculares y puede contribuir al desarrollo de autoinmunidad, algunos tipos de cáncer y deterioro cognitivo”, fundamento la investigación.
Además, otro de los problemas relacionados con el alto consumo del condimento fue que la ingesta de alimentos aumentó, mientras que hubo una “respuesta de conservación de agua similar a la estivación, el letargo metabólico inducido en diversas especies a través de una exposición prolongada a un ambiente cálido y árido”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir máximo 5 gramos de sal al día, es decir, menos de una cucharada.