Los estadounidenses probablemente recibirán la vacuna para el COVID-19 antes que el resto del mundo si Sanofi, el gigante farmacéutico francés, logra desarrollar una con éxito.
¿La razón? Esto se debe a que Estados Unidos fue el primer país en financiar la investigación de vacunas de Sanofi, señaló el responsable ejecutivo de la compañía, Paul Hudson, en una entrevista con Bloomberg News.
Hudson advirtió que Europa corre el riesgo de quedarse atrás a menos que intensifique los esfuerzos para buscar una protección contra la pandemia del nuevo coronavirus que ha cobrado la vida de más de 290 mil personas en todo el mundo.
"El Gobierno de Estados Unidos tiene derecho al mayor pedido anticipado porque invirtió en asumir un riesgo", argumentó el directivo. La administración Trump, que amplió la asociación para vacunas con la compañía en febrero, espera obtener las dosis primero.
Sanofi es uno de los principales actores entre las numerosas compañías que buscan una vacuna, necesaria para volver a reanudar la actividad económica tras una caída en la producción como resultado de las medidas de aislamiento. En dicha búsqueda, se ha asociado con un competidor en Reino Unido, GlaxoSmithKline, en el proyecto respaldado por EU.
La compañía afirma que podría producir 600 millones de dosis al año. Hudson pretende duplicar esa actividad.
Los gobiernos de todo el mundo están apoyando campañas de financiación y esfuerzos de investigación. Algunos expertos sanitarios han advertido que la carrera podría dejar fuera a los países que no pueden pagar vacunas protectoras, exponiéndolos a muertes masivas y al impacto económico de nuevas olas de contagios por el nuevo coronavirus.
"He estado haciendo campaña en Europa para decir que EU recibirá primero las vacunas", dijo Hudson a través de un enlace de vídeo desde su casa en París. "Así será porque han invertido para tratar de proteger a su población, para reiniciar su economía".