CIUDAD DE MÉXICO.- La percepción sobre inseguridad en México aumentó 4.4 puntos porcentuales del último trimestre de 2013 a marzo de 2014, al pasar de 68 a 72.4 por ciento, según la tercera Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El 37.7 por ciento de la población advierte que en los próximos 12 meses la situación de inseguridad se mantendrá, mientras que el 27.6 por ciento señaló que empeorará.
En el último sondeo del Banxico entre especialistas del sector privado, la inseguridad pública apareció, por tercer mes consecutivo, como el principal problema que obstaculizaría el desempeño económico. Juan Pablo Castañón, presidente de la Coparmex, aseveró que la seguridad incide de manera importante en los proyectos de inversión.
El incremento en los datos de la misma encuesta aplicada en diciembre y septiembre del año pasado, sólo se dieron en el rubro sobre percepción de ciudad segura, mientras que en el resto, no hay cambios significativos.
El estudio presentado este martes por el INEGI, fue realizado en diversas ciudades de 25 entidades federativas, además de seis con más de cien mil habitantes de los seis estados restantes. Éstas últimas son: Tijuana, Baja California; León, Guanajuato; Acapulco, Guerrero; Cancún, Quintana Roo; Tampico, Tamaulipas y Veracruz, Veracruz, además del Distrito Federal.
La ENSU se aplica cada tres meses y permite evaluar la percepción en conceptos de seguridad pública como son la sensación o percepción de la inseguridad por temor al delito; expectativa social sobre la tendencia del delito; atestiguación de conductas delictivas o antisociales; cambio de rutinas por temor a ser víctima del delito y percepción del desempeño de la policía como autoridad responsable en materia de seguridad pública.
La encuesta de INEGI permite contar con un panorama amplio de elementos sobre la seguridad pública. Los dos primeros, se refieren a la percepción de la seguridad en términos del temor a la delincuencia; otro se enfoca en el conocimiento de conductas delictivas o antisociales; el cuarto elemento se refiere al cambio de rutinas por temor a ser víctima del delito; y el quinto muestra la percepción sobre el desempeño de las policías locales.
Los dos primeros levantamientos de esta encuesta, se realizaron en septiembre y diciembre de 2013 y toma en cuenta a personas mayores de 18 años.
Sobre la expectativa social en torno a la seguridad pública, 37.7 por ciento de los encuestados consideraron que en los próximos 12 meses la situación de inseguridad en su ciudad se mantendría, mientras que el 27.6 por ciento señaló que empeoraría.
En diciembre y septiembre del año pasado, el 35.9 por ciento de la población dijo que la situación de inseguridad se mantendría, lo que revela un incremento de 1.8 puntos, mientras que en la población que manifestó que la situación empeoraría fue de 26.1 por ciento; es decir, un incremento de 1.5 puntos.
El INEGI indica que con respecto a los datos de diciembre, se observa que hay una disminución en las expectativas de mejoría de la seguridad, contrario a la opinión sobre la situación "que seguirá igual de mal" e incluso que "empeorará", que se incrementó.
Otro punto a destacar es lo que refiere a ciudadanos que son testigos de situaciones que involucran el consumo de alcohol en las calles, robo o asaltos, vandalismo y venta-consumo de drogas. En este sentido, disminuyó, pues en diciembre del 2013, el 69.4 por ciento de la población encuestado manifestó haber atestiguado consumo de alcohol en la vía pública, mientras que la última encuesta revela que fue el 69 por ciento.
Modifican conductas
La encuesta reveló que los ciudadanos cambiaron sus hábitos por la inseguridad. Por ejemplo, ante el temor de ser asaltados, el 65 por ciento dijo que prefiere no llevar consigo cosas de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito. Sobre la misma pregunta, los datos de diciembre arrojaron el 63.6 por ciento.
Tampoco hay aumento significativo a lo presentado en diciembre y ahora, sobre el cambio de rutina en el hábito de caminar en los alrededores de la vivienda después de las ocho de la noche e incluso permitir que salieran a la calle los hijos menores. El primero, pasó de 49.3 a 50.8 por ciento, mientras que en el segundo caso fue de 46.6 a 47.6 por ciento.
Sobre el desempeño de las policías estatales y municipales, en diciembre el 30.1 por ciento de los encuestados dijo que la policía era algo efectiva; para marzo de este año bajó a 29.6 por ciento esa percepción.
Con información de Tláloc Puga e Isabel Becerril