CIUDAD DE MÉXICO. La empresa CONIISA, que supervisó la obra electromecánica de la Línea 12 del Metro, afirmó que desde un mes antes de su inauguración se detectó el desgaste ondulatorio de las vías en su tramo elevado, pero a pesar de que se tomaron medidas el fenómeno se presentó de manera intensa.
Al reunirse con la comisión especial de la Asamblea Legislativa que investiga las fallas en de la Línea 12, los directivos de CONIISA, Ricardo Cabañas y Gerardo Ferrando Bravo indicaron que las causas de que el desgaste ondulatorio sea extremo, se deba la falta de mantenimiento o a retraso en el mismo.
Bravo precisó que la Línea 12 fue inaugurada el 30 de octubre del 2012, pero antes, el 30 de septiembre se detectó un desgaste anormal en "el hongo" de los rieles de las curvas 11 y 12 con un radio menor a los 300 metros.
Sostuvo que por ello, se realizaron mesas de trabajo con los consorcios constructor y verificador, así como el Proyecto Metro (PM) y el STC, donde se acordó la sustitución de los rieles interiores de ambas curvas y separar las vías en las curvas a su máxima tolerancia.
Se llevó a cabo el reperfilado de los rieles el 11 y 12 de octubre del 2012, se sustituyeron 900 metros de riel en dichas curvas , y con ello se recuperó la geometría y configuración de la vía conforme a las instrucciones del Proyecto Metro, agregó el representante de CONIISA.
Sin embargo, Bravo advirtió que a pesar de que también se realizó el esmerilado del riel, nivelación de vías, la sustitución de durmientes dañados, de balastos, y el reperfilado de las ruedas de los trenes, "el problema continuó dándose de manera exponencial en esas curvas".
"Los elementos que se fueron dañando posteriormente estuvieron permanentemente atendidos y se instrumentaron medidas, pero la consecuencia es que los daños cada vez fueron mayores", detalló.
De esta manera, luego de la inauguración, se siguió presentado el desgaste ondulatorio en diversos accesorios de las vías, los rieles, en los aparatos de vía, en los durmientes "y un desgaste anormal en las ruedas del tren", explicó el directivo.
"Desde esa fechas y hasta el 11 de marzo del 2014, cuando se suspendió el servicio en 11 estaciones, de manera permanente se realizaron acciones de mantenimiento para resolver el desgaste ondulatorio", pero "el deterioro del sistema de vías y en trenes se siguió presentando cada vez de manera más intensa", aseveró.