CIUDAD DE MÉXICO. En México la escuela privada le agrega muy poco valor a los niños mexicanos, asegura Claudio X. González, presidente de la organización Mexicanos Primero, para quien también la "élite", contribuyó al deterioro educativo de este país.
Al dictar una conferencia durante un evento organizado por la Red Familia, el doctor señaló que este sector se "adormiló".
"La élite de este país se olvidó de la educación pública, pero también de la educación de sus hijos", destacó al abundar que los resultados de pruebas como Enlace o PISA, dan muestra de que la educación privada no siempre es la mejor.
Dijo que la diferencia entre el promedio más bajo de la OCDE y el del más alto de México, es muy amplia, pues el 68 por ciento de los estudiantes de escuelas privadas se encuentran en los niveles 0, 1 y 2, considerados los más bajos para competir en un mundo global.
"El problema no sólo está abajo, también en la élite", enfatizó X. González, para quien los pobres están haciendo más por educarse que los ricos.
Al respecto Mario Romo, director general de la organización Red Familia, indicó que una posible respuesta sería que más del 90 por ciento de las empresas del país son familiares, contrario a otras que deben demostrar capacidad para ingresar a ellas y desarrollarse.
"Las élites no tienen necesidad de formarse porque al final llegarán a las sillas. Ésta podría ser una hipótesis", sostuvo.
El presidente de Mexicanos Primero, dijo no tener respuesta al porqué de esta situación, pero admitió que su impresión es que siempre se ha tenido una educación pobre en este país, pues cuando hay logros, la buena educación se vuelve la propia defensora, y eso nunca se ha visto.
"Lo que yo he visto es que donde más se preocupan por la educación, son los que más adelanto educativo tienen, y los que duermen su sueño de un mejor futuro sin construirlo, pues simplemente no tiene mucho impulso", indicó.
No obstante, Claudio X. González reconoció que la gente más rica tiene ciertas ventajas sobre los de menos ingresos, debido a que estudian más años.
En promedio, dijo, un mexicano estudia 8.6 años, pero una persona de mayores ingresos lo hace alrededor de 12, lo que de alguna manera también le ayuda.
No obstante reconoció que "se tiene una élite poco preparada y aplatanada", debido a que la educación pública se mantiene estancada y no genera presión para ellos.
Desde su punto de vista, lo que tendría que hacerse es empujar la educación pública, pues de esta manera la privada se verá también obligada a mejorar, de modo que todos ganarían, especialmente el país, que ha permanecido inamovible.
"Hay que romper con esa inercia que tanto daño ha hecho a México", concluyó.