TIXTLA. En las instalaciones de la Escuela Normal de Ayotzinapa, el nuncio apostólico, Christophe Pierre, celebró una misa en la que oró por los 42 normalistas desaparecidos, la navidad, la reconciliación y la paz en el estado de Guerrero y en México.
El representante del Vaticano llamó a los padres de familia a no perder la esperanza, la fe, a creer en Dios, a perdonar pero sobre todo para que no caer en el desamor a su prójimo y celebrar en estas fechas el nacimiento del hijo de Dios.
Agregó que el papa Francisco comparte pena y su dolor, que no están solos, "el papa está con ustedes, yo para eso he venido, pero además hay un acompañamiento permanente en oración por parte de la iglesia católica hacia los padres y en torno a los jóvenes desaparecidos, objeto de la violencia".
Se pronunció porque la fuerza del amor los acompañe, para que sean ese pueblo de Dios que ama y perdona; los llevó a repetir la oración de Francisco de Asís, que narra, "señor hazme un instrumento de paz, que donde haya odio ponga amor"; se entonaron cantos de paz, por parte de los niños del coro de la parroquia local.
En la misa acompañaron al representante de El Vaticano, el arzobispo de Acapulco Carlos Garfias Merlos y el obispo de Chilpancingo-Chilapa Alejo Zavala Castro, así como párrocos locales.
El nuncio Christophe Pierre saludó de mano a cada uno de los padres de familia, les reiteró que no pierdan la esperanza, que permitan que el amor de Cristo entre a sus hogares y a sus corazones, durante esta temporada en que se recuerda su nacimiento; mencionó a cada uno de los jóvenes, así como los cincos desaparecidos de Chilapa, dos comerciantes y tres profesionistas.
Al término de la homilía los padres de familia de los desaparecidos se reunieron con los representantes católicos a quienes les entregaron cartas para el papa Francisco en las que le solicitan, entre otras cosas, que puedan reunirse con él.