La ola de despidos en Twitter ordenada por Elon Musk están llevando a los empleados actuales y anteriores a cuestionar si la red social tendrá los recursos para mantener sistemas como la moderación de contenido funcionando de manera efectiva, de cara a las elecciones intermedias en Estados Unidos.
Entre el jueves y este viernes, más de la mitad del personal de la red fue despedido, lo que afectó a casi todos los equipos de la empresa.
Los equipos de productos e ingeniería fueron reducidos en más de 50 por ciento, según dos fuentes, y otros grupos, como comunicaciones, marketing, derechos humanos y diversidad, fueron eliminados casi por completo.
Aquellos a quienes repentinamente se les restringió el correo electrónico se quedaron frenéticamente enviando mensajes en Signal y grupos de chat externos para saber quién todavía tenía trabajo. “Es como un incendio”, comentó un extrabajador. “La gente está buscando sobrevivientes”.
Recorte de personal en el momento menos oportuno posible
La drástica reducción del personal atrajo el escrutinio de personas internas de Twitter, grupos externos y observadores contra la desinformación, quienes dicen que no está claro cómo Twitter administrará su red en expansión, que tiene un impacto enorme en la conversación política y cultural global, con menos manos.
Históricamente, Twitter ha sido una herramienta importante para seguir las noticias durante las elecciones, siendo el primer lugar donde la gente se informa antes que la televisión u otras redes sociales. Ahora, el sitio “ha sido intervenido masivamente”, volviéndose vulnerable a problemas como campañas de desinformación coordinadas, opinó Kate Starbird, profesora asociada de la Universidad de Washingto.
“Algunas de las formas en que esa plataforma funcionó ayer no serán las formas en que funcionan hoy, mañana y antes de las elecciones del martes”, advirtió.
El equipo de curación de Twitter, que colaboró con grupos de medios para publicar contenido verificado, fue disuelto, aseguraron dos fuentes. El equipo de política legal, que elimina contenido basado en solicitudes gubernamentales y legales y revisa las consultas de las fuerzas del orden, enfrentó “recortes masivos”, según una persona familiarizada con el asunto.
El equipo de comunicaciones de Twitter, responsable de relacionarse con los periodistas y publicar comunicados de prensa, se redujo de casi 100 personas a dos, señalaron otras personas. El equipo de socios, que construye y mantiene relaciones con usuarios famosos, como atletas, actores y músicos, fue eliminado casi por completo.
También alimenta la tensión el plan de Musk de permitir que cualquier persona pague por una marca de verificación en Twitter a partir del próximo lunes, como parte de una nueva iniciativa para generar ingresos a través de suscripciones a Twitter Blue, su producto premium.
Si el proyecto se mantiene, significaría que cualquier persona podría pagar 8 dólares para que su cuenta parezca más legítima (tenga la famosa ‘palomita azul’), fomentando así el que aparezcan cuentas que se hagan pasar por candidatos o incluso entidades gubernamentales.
Twitter, sin ‘cabezas’ que inspiren tranquilidad
Más allá de las elecciones, si Twitter se vuelve más vulnerable a delincuentes, los resultados de la empresa podrían verse afectados. Algunos anunciantes ya han detenido sus inversiones o expresado su preocupación por el período de incertidumbre.
Al respecto, Musk tuiteó este viernes que la empresa “ha tenido una caída masiva en los ingresos debido a que los grupos activistas presionan a los anunciantes, aunque nada ha cambiado con la moderación del contenido e hicimos todo lo posible para apaciguarlos”.
El grupo de marketing de Twitter estuvo entre los grupos más afectados, con un par de docenas de empleados restantes de un equipo que tenía cerca de 400 personas, según dos fuentes. El grupo de ventas de anuncios se vio menos afectado por los recortes.
Aún así, un punto de preocupación es que los empleados de alto nivel que normalmente serían llamados para calmar las preocupaciones de los anunciantes como el jefe de ventas Jean-Philippe Maheu o la directora de marketing Leslie Berland, fueron despedidos de la empresa a principios de esta semana.
El equipo de confianza y seguridad de Twitter, que se encarga de la moderación del contenido, también se vio afectado por los despidos, que afectaron a 15 por ciento del personal, según Yoel Roth, jefe de seguridad e integridad de la empresa, que se queda.