Apple y Broadcom deben pagar mil millones de dólares en daños por infringir las patentes del Instituto de Tecnología de California sobre tecnología Wi-Fi, ordenó este jueves un jurado en California.
Apple recibió la orden de pagar 837.8 millones de dólares, mientras que Broadcom recibió un veredicto de 270.2 millones de dólares, de acuerdo con los abogados de CalTech. La universidad demandó a las empresas de tecnología por una serie de patentes relacionadas con la transmisión inalámbrica de datos.
Este es el veredicto de jurado más grande de cualquier tipo en lo que va del año, y es el sexto veredicto de patentes más grande de la historia, según datos de Bloomberg.
Mientras Apple pasó años demandando a otras compañías por presuntamente infringir sus patentes, el fabricante de iPhone también ha criticado cómo se calculan los daños en los casos de patentes.
Así, le ha pedido a la Corte Suprema de Estados Unidos que aborde el tema en una larga disputa con VirnetX, una empresa con menos de 2 millones de dólares de ingresos anuales que ha estado buscando su gran día de pago por parte de Apple desde hace años.
Apple indicó que planeaba apelar el veredicto de CalTech. Broadcom también planea una apelación, apuntó esta compañía, y agregó que no está de acuerdo con la base fáctica y legal del veredicto.
CalTech está "complacido de que el jurado descubrió que Apple y Broadcom infringió la patente de Caltech", declaró un portavoz, añadiendo que la universidad está "comprometida a proteger su propiedad intelectual en cumplimiento de su misión de expandir el conocimiento humano y beneficiar a la sociedad mediante la investigación integrada con la educación".
Abogados de Apple y Broadcom negaron haber infringido las patentes e indicaron que la escuela no tenía derecho a daños significativos, incluso si las compañías usaban los inventos.
La demanda de 2016
Caltech, que presentó la demanda en 2016, dijo que los iPhone, iPad, iPod, Apple Watches, computadoras MAC y asistentes HomePod, así como los enrutadores inalámbricos AirPort, además de dispositivos descontinuados, utilizan componentes infractores de Broadcom.
Apple y Broadcom señalaron previamente en documentos judiciales que las demandas contra Apple están "basadas únicamente en la incorporación de chips presuntamente infractores" en sus productos.
Los únicos problemas ante el jurado eran si los chips de Broadcom usaban las patentes de la universidad californiana y, en caso afirmativo, cuánto debían pagar por daños.
El veredicto contra Apple marca uno de los más grandes contra el gigante tecnológico de Cupertino, California, en su historia.