Kevin Mayer, CEO de TikTok, renunció este jueves ante la presión de Estados Unidos para que el propietario chino venda la popular aplicación de videos, que según la Casa Blanca es un riesgo de seguridad.
En una carta a sus empleados, Mayer explicó que su decisión de irse se produce luego de que el "ambiente político haya cambiado drásticamente".
La decisión llega después de que el presidente de EU, Donald Trump, ordenó la prohibición de TikTok a menos que su empresa matriz, Bytedance, venda sus operaciones en el país a una empresa estadounidense en un plazo de 90 días.
"He reflexionado mucho sobre qué requerirán los cambios corporativos estructurales y lo que significan para el puesto global que asumí. Con este telón de fondo, y mientras esperamos alcanzar una resolución muy pronto, con gran pesar quiero hacerles saber que he decidido dejar la compañía", señaló en el escrito.
Mayer, un exejecutivo de Disney, asumió como CEO de TikTok apenas en mayo.
"Entendemos que la dinámica política de los últimos meses ha cambiado significativamente el ámbito del rol que Kevin tendría en adelante y respetamos plenamente su decisión. Le agradecemos su tiempo en la empresa y le deseamos lo mejor", agregó TikTok en un comunicado.
A principios de mes, Trump ordenó una amplia aunque poco concreta prohibición de relacionarse con los propietarios chinos de las apps TikTok y WeChat, mientras el país incrementa el escrutinio a las firmas tecnológicas chinas, citando preocupaciones porque puedan suponer una amenaza a la seguridad de la nación.
Bytedance está en negociaciones con Microsoft para que la firma estadounidense adquiera las operaciones de TikTok en EU.