Cuando Donald Trump visitó una fábrica de Austin, Texas, en noviembre, junto con el CEO de Apple, Tim Cook, el presidente estadounidense promovió el evento como una celebración de la fábrica y el regreso de empleos bien remunerados al país.
El CEO de Apple había presentado con éxito su caso a la administración sobre que algunos componentes para los productos de su compañía deberían excluirse de las tarifas de Trump en China a cambio de mantener la producción en EU.
"Hoy inauguré una importante planta de manufactura de Apple en Texas que traerá empleos bien remunerados a Estados Unidos", tuiteó Trump el 20 de noviembre.
Pero la instalación que visitó Trump es propiedad y está operada por el fabricante por contrato Flex y ha estado abierta durante 30 años. Durante décadas, ha estado produciendo varios dispositivos para muchas compañías, incluyendo Cisco Systems. Apple ha estado en la planta Flex desde 2013.
Partes de una computadora
"No tiene que preocuparse por los aranceles", comentó Trump a Cook durante la visita del 20 de noviembre a la fábrica. "Porque cuando construyes en EU, no tienes que preocuparte por los gravámenes".
Dos meses antes, el fabricante de iPhone estaba exento de los aranceles aplicados a los componentes que importa de China que utiliza en la Mac Pro de escritorio en la planta Flex. La eliminación de una tarifa del 25 por ciento en artículos como fuentes de energía y placas de circuitos impresos que albergan los componentes principales de la computadora redujo los costos de Apple y, según Cook, fue la razón por la cual la compañía con sede en Cupertino, California, continuó su fabricación en la planta de Austin.
Pero otras compañías, como Cisco, con sede en San José, California, no recibieron el mismo trato. Ahora los trabajos relacionados con la fabricación de sus productos están en riesgo.
En julio de 2019, Cisco solicitó al gobierno que eximiera del mismo arancel del 25 por ciento a los suministros de energía de la compañía para servidores y conmutadores de fabricación estadounidense. Cisco indicó que ni este producto fabricado en China ni uno comparable están disponibles en EU de fuentes de terceros países.
Exenciones arancelarias
Cisco, como muchas otras compañías estadounidenses, hizo el mismo pedido que Apple a la administración Trump: las exenciones eran necesarias para salvar el empleo de estadounidenses.
Después de meses de estar atrapados en el proceso, a Cisco le comunicaron el 5 de marzo que su solicitud de exención de tarifas fue denegada.
"Después de una cuidadosa revisión, su solicitud fue denegada porque esta se refiere a un producto estratégico importante relacionado con 'Hecho en China 20250 u otros programas industriales chinos", escribió en el aviso Joseph Barloon, asesor general de la Oficina del Representante Comercial de EU.
Las solicitudes de exención de Apple y Cisco fueron sorprendentemente similares, sobre todo cuando se cuestionó si sus productos ayudaron a China a expandir su poder industrial.
Fuente de energía
"Las fuentes de energía en cuestión no son estratégicamente importantes ni están relacionadas con 'Hecho en China 2025', ni con ninguna otra política industrial china", respondió Cisco. "La fabricación de estos productos en China no está relacionada con los esfuerzos del país asiático para desarrollar productos nativos y avanzados de tecnología de la información y comunicación".
Apple usó un lenguaje casi idéntico: "Este producto es un componente de un dispositivo electrónico de consumo. No es estratégicamente importante ni está relacionado con 'Hecho en China 2025' u otros programas industriales chinos".
De hecho, las cajas de suministro de energía importadas de China no requieren conocimiento tecnológico de vanguardia. En su mayoría, están hechos con grandes bobinas de alambre de cobre, condensadores y otros cables básicos. No se han fabricado en EU durante años y no requieren mano de obra altamente remunerada y calificada.
La solicitud de Apple para obtener la exención arancelaria se aprobó en septiembre de 2019.
Alivio de tarifas
Un portavoz de la oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) no respondió a una solicitud de comentarios cuando fue cuestionado sobre por qué la unidad de suministro de energía de Apple no constituye un producto estratégicamente importante para los programas industriales de China y sí lo hace uno casi idéntico de Cisco.
Los representantes de Cisco señalaron a la USTR y otros en la administración mientras que de las solicitudes dependían los trabajos en riesgo, según fuentes familiarizadas en el proceso durante conversaciones privadas, quienes pidieron no ser identificadas.
En un comunicado tras la decisión, Cisco puntualizó que las exenciones que buscaba "apoyarían la competitividad de la manufactura nacional".
La compañía declaró que continuaría trabajando con la oficina del representante comercial para el alivio de los aranceles en otros artículos, incluido "uno para el equipo de comunicaciones que creemos que es vital para apoyar la respuesta médica ante el coronavirus".
La USTR no hizo públicos los motivos para aprobar las solicitudes de excepciones de una empresa. La comunidad empresarial se ha quejado de la falta de visibilidad de por qué ciertas compañías obtienen lo que pareser un trato preferencial sobre otras.
Flex, con sede en San José, que trabaja para ambas compañías, indicó en un comunicado que "asegurar exenciones de impuestos es un proceso individualizado basado en la situación de cada cliente" y se negó a identificar a otros clientes que usan la planta de Austin. "La presencia global de Flex ofrece a nuestros clientes opciones para ubicaciones de fabricación, sin embargo, también trabajamos estrechamente para ayudar a nuestros clientes a obtener exenciones arancelarias según sus necesidades".
En una carta al jefe comercial Robert Lighthizer enviada el año pasado, legisladores de Texas subrayaron que los trabajos están en juego en el caso de Cisco. "Las operaciones de Cisco en Texas apoyan directamente más de mil 150 empleos en nuestro estado e indirectamente respaldan miles de trabajos relacionados en logística, almacenamiento, distribución y transporte", destacaron los legisladores en su misiva del 13 de septiembre.
La decisión de la oficina comercial significa que ahora es mucho más barato para Cisco armar sus servidores, conmutadores y enrutadores en plantas Flex en México y exportar el dispositivo terminado sin aranceles a EU. La compañía se negó a decir qué medidas tomaría con respecto a empleos o fabricación a la luz de la denegación de exención arancelaria.