MegaFlux, la empresa de ingeniería 100 por ciento mexicana desarrolló y montó un tren motriz eléctrico en un autobús de siete años de la flota del transporte público de la Ciudad de México.
Por este hecho, la empresa fue galardonada con el premio “Hito de la Ingeniería Nacional” que otorga la Academia de Ingeniería de México.
La conversión de esta unidad fue el paso previo al desarrollo del primer autobús eléctrico 100% mexicano, fabricado a partir del esfuerzo compartido entre el gobierno de la CDMX, la academia, la industria y la sociedad. El CONACYT proporcionó recursos de desarrollo para este nuevo autobús de 10 metros que MegaFlux lanzará el segundo semestre de 2024 en alianza con la armadora mexicana DINA.
“Venimos de un modelo de producir y desechar, pero en tecnología de vehículos eléctricos, este modelo es caduco; los componentes de larga duración, la baja vibración y la simplicidad de la arquitectura motriz están concebidos para una larga vida y una alta disponibilidad”, precisó Roberto Gottfried, CEO de MegaFlux.
Con esta solución, que combina tecnología con asequibilidad la compañía busca hacer que el transporte público, que mueve a uno cada tres mexicanos, sea libre de emisiones.
Durante la ceremonia de premiación, Roberto Gottfried destacó que “la transición a la movilidad eléctrica abre la oportunidad para posicionar a México en tecnología de alto valor agregado. Nuestro país es hoy una potencia en la manufactura y exportación de vehículos pesados, pero se concentra en la fase del ensamblaje y en menor medida en alta tecnología. Con el auge de la electromovilidad, se abre una oportunidad histórica para empresas como nosotros, de generar innovación de alto calibre y empleos verdes en medio del gran momento mexicano que estamos viviendo”.
Además, destacó que en el transporte de carga hay una gran oportunidad. “La contaminación en las ciudades proviene principalmente de los camiones de carga a diésel; en el Valle de México estos vehículos representan solo un 5 por ciento de la flota, pero generan el 40 por ciento de las emisiones que afectan la salud.
Para MegaFlux, la electromovilidad basada en tecnología mexicana es una palanca de desarrollo y equidad que atiende los desafíos de la crisis climática, la contaminación y la sustentabilidad energética. La fiabilidad de sus camiones está respaldada por el éxito operativo de 10 unidades de reparto en la industria cervecera, que han funcionado eficazmente durante año y medio.
Datos técnicos del autobús de la flota del transporte público de la CDMX que fue convertido a eléctrico por MegaFlux:
- El motor MegaFlux tiene un armazón NEMA tipo ODP y proporciona 110 kW de potencia continua y 160 kW de potencia pico.
- Ofrece un torque pico de 1100 Nm y su curva de torque emula la del motor diésel.
- Está acoplado a una transmisión Allison automática de 6 velocidades, original del chasis diésel.
- Se desarrolló un mecanismo para conectar el motor al volante de inercia y al ensamble del convertidor de torque.
- MegaFlux creó un sistema que mantiene un ralentí de motor para mantener la presión hidráulica de la transmisión.
- Utiliza química de LIFePO4 (litio Hierro Fosfato) por su durabilidad y seguridad.
- El voltaje nominal de la batería es de 615 V y su capacidad nominal es de 172 kWh.