Los vuelos espaciales privados sufrieron un revés después que dos accidentes en cuatro días pusieron de relieve los peligros a los que se enfrentan y podrían implicar un retraso de tres a cinco años.
El 28 de octubre, un cohete no tripulado de Orbital Sciences estalló sin dejar víctimas humanas y luego, el 31 de octubre, la nave SpaceShipTwo, de Virgin Galactic, se perdió en el Desierto de Mojave, en California, dejando un muerto y un herido.
"Esto pone el foco de atención en qué significa que haya personas a bordo de estas naves", dijo Loren Thompson, analista de la industria aeroespacial y asesor de Lockheed Martin Corp. "Casi inevitablemente significa que los directores de los programas del gobierno serán más cuidadosos y más conservadores".
Los accidentes podrían significar un retraso de tres a cinco años para el programa de Virgin Galactic, de Richard Branson, de transportar pasajeros fuera de la atmósfera terrestre, estimó Michael Blades, analista aeroespacial y de defensa de Frost Sullivan, firma de investigación de mercado de Nueva York. La compañía tendrá que averiguar qué fue lo que no funcionó y luego demostrar a los reguladores por medio de pruebas que el error no se repetirá.
Hace poco más de un mes, la NASA presentó como un triunfo la asignación de contratos por seis mil 800 millones de dólares a Boeing y a Space Exploration Technologies, de Elon Musk, para transportar a los astronautas a la Estación Espacial Internacional.
Ahora la incipiente actividad de los vuelos espaciales privados se enfrenta a investigaciones para determinar qué salió mal en estas tragedias. La Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) está a cargo de la indagación con el apoyo de la Administración Federal de la Aviación, que otorga las licencias para las operaciones espaciales comerciales.
El presidente de la NTSB, Chris Hart, y un equipo de investigadores iniciaron su trabajo en California el sábado. Después de una breve conferencia de prensa, comenzaron a revisar los datos de vuelo, entrevistar a testigos y recorrer el desierto en busca de los pedazos de la nave.
"Si bien no se trató de una misión de la NASA, todos los hombres y las mujeres que han dedicado su vida a la exploración sentirán el dolor de esta tragedia", expresó en una declaración Charles Bolden, titular de la agencia espacial estadounidense. "Elogiamos la pasión de todos los integrantes de la comunidad espacial que corren riesgos para ampliar las fronteras de las hazañas humanas".
PERO BRANSON CONSERVA A SUS CELEBRIDADES
Virgin Galactic planeaba el debut de los vuelos turísticos comerciales para 2015 con SpaceShipTwo; la empresa ha atraído a celebres clientes como el físico Stephen Hawking y la cantante Sarah Brightman. Branson señaló el mes pasado que 800 personas estaban apuntadas para sus viajes de 250 mil dólares.
El fin de semana, un retraído Branson habló en la rueda de prensa de la NTSB sobre el accidente en Mojave. "Vamos a averiguar qué salió mal; descubriremos cómo mejorar la seguridad y el rendimiento, avanzaremos juntos", dijo.
También aseguró que ha recibido correos de sus eventuales pasajeros instándolo a seguir adelante, sin embargo, señaló que ya ofreció reembolsos y que espera perder "uno o dos" clientes.
Con el tiempo, este accidente no va a disuadir a los clientes de Virgin Galactic, porque el sueño de viajar al espacio es demasiado fuerte para algunos pioneros millonarios, consideró Blades.
"La gente rica que quiera hacerlo irá al espacio", dijo. "Sólo que va a tomar un poco más de tiempo para que la fiabilidad sea clara".