El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, dijo que la entidad hará todo lo posible para evitar que la depreciación de la moneda local afecte a la inflación.
El peso mexicano, que se ha depreciado casi un 12 por ciento en lo que va de 2015, profundizó el miércoles sus pérdidas para negociarse a un nuevo nivel mínimo histórico de 16.55 por dólar.
El funcionario dijo que el Banco de México debe estar vigilante para mantener la inflación baja y estable, y que las medidas adoptadas para proteger al peso están funcionando.
"El Banco de México, tengan la seguridad, hará todo lo que está en nuestro instrumental para que se perpetúe esta circunstancia" de inflación baja y estable, dijo Carstens.
El banco central estima que la inflación permanecerá por debajo de la meta oficial del 3.0 por ciento lo que resta del año, y cerca de ese nivel en 2016.
El principal riesgo inflacionario se encuentra en que la fuerte depreciación que ha venido observando el peso se incremente y se traslade a los precios de bienes.
El peso mexicano, que se ha depreciado casi un 12 por ciento en lo que va de 2015, profundizó el miércoles sus pérdidas y se negociaba en un piso histórico a 16.55 por dólar.