Economía

Casi la mitad de los ‘chilangos’ viven en casa ajena

Los altos precios de la vivienda, así como la movilidad laboral son algunos de los factores que impiden a las personas comprar su propio hogar.

Poco menos de la mitad de los habitantes de la Ciudad de México vive en casa ajena, ya sea rentada o prestada, a pesar de contar con mayor penetración del crédito que otras entidades.

Los altos precios de la vivienda, junto con la mayor movilidad laboral y la preferencia por la cercanía a los centros de trabajo, hacen que en la capital 42 de cada 100 personas rente o viva en un domicilio prestado, nivel 1.5 veces mayor al promedio nacional.

"Pese a tener mayor inclusión financiera que las ciudades intermedias y emergentes, en la CDMX prevalece la tendencia a alquilar debido a la mayor movilidad intralaboral, la congestión metropolitana de los nodos vivienda- trabajo y la búsqueda de una solución más versátil ante cambios de empleo, de lugar de trabajo o actividad productiva", explicó Leonardo González, analista de real estate, de propiedades.com.

También el precio juega un papel importante como elemento discriminatorio a la hora de adquirir vivienda propia.

En la CDMX, 11 por ciento de los hogares financia su vivienda con créditos bancarios, casi el doble que el promedio nacional (6.2 por ciento).

Pero, 24.7 por ciento vive en una casa rentada y 17.6 por ciento en una prestada, cuando en promedio en el país las tasas son 15 y 14 por ciento cada una, según la ENIGH 2016 del INEGI.

González Tejeda estimó que persistirá la propensión a alquilar en la CDMX, ante el encarecimiento por la escasez de suelo, junto con la tendencia a la 'verticalización' y la mayor oferta de inmuebles enfocados en nichos de ingreso alto.

Menor tenencia propia

Mientras que en la capital del país, 47.9 por ciento de los hogares tienen casa propia y 6.4 por ciento la está pagando, a escala nacional esta proporción es de 59 y 10 por ciento en cada caso.

Esto sitúa a la CDMX en los últimos lugares del país en ambos rubros (sitios 28 y 22).

González Tejeda, anotó que en la ciudad se reduce la adquisición de vivienda nueva debido al mayor precio y a los estándares crediticios existentes, a los que por ejemplo un millenial difícilmente podría acceder.

También lee: