Durante 26 días, la representación comercial de la Casa Blanca recibió 12 mil 453 comentarios públicos de organizaciones empresariales, campesinas, patronales y civiles.
Filias y fobias fueron enviadas por correo desde todos los estados de la Unión Americana, peticiones y motivos fueron expresados con la intención de modernizar, ampliar o cancelar el acuerdo trilateral.
En Minnessota, agricultores y fabricantes lanzaron un rotundo no a las nuevas barreras comerciales y alertaron por afectaciones para 30 mil asociados.
Los productores de maíz en Colorado, exigieron mantener y ampliar el acceso al mercado, así como incluir e incluso ampliar el acceso al mercado, así como incluir en la renegociación innovaciones en la producción agrícola.
Fabricantes de barcos en Illinois advirtieron que, de imponer aranceles, habría aumento en los precios del consumidor y afectaciones a 35 mil empresas, pues Canadá, México y el Caribe son sus principales compradores.
Mientras que sectores tecnológicos como Intel, pidieron eliminar aranceles y rechazaron la imposición de derechos sobre el contenido al comercio digital.
La organización de trabajadores Atlantic Council exigieron garantías para no exponer 14 millones de empleos y acelerar las negociaciones, pues, advierten, las elecciones presidenciales en México del 2018 dificultarán la capacidad de lograr un acuerdo.
Los más críticos, como los productores de fresas y tomates de Florida exigen modificar un problema comercial histórico, ya que aseguran el pacto ha sido 'desproporcionalmente negativo', por lo que pidieron al gobierno de Donald Trump "medidas oportunas' contra los productos mexicanos.
También los acereros de Chicago exigieron a la administración de Trump eliminar el capítulo 19 del TLCAN, específicamente en el capítulo que se refiere a las sanciones por el dumping, pues aseguran que al menos en 43 ocasiones México o Canadá han logrado imponer multas a empresas estadounidenses.
Los foros celebrados hoy y hasta el 29 de junio en Washington son el comienzo de la renegociación, que según la administración del presidente Donald Trump, tendrá un periodo de consultas de 90 días y que concluirá el próximo, fecha a partir de la cual podría renegociarse oficialmente, el acuerdo trilateral.