En Arizona, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, señaló que no ve posible un acuerdo en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que comenzó la semana pasada.
"Personalmente no creo que podamos llegar a un acuerdo con México y Canadá, porque se han aprovechado de nosotros de manera tal que no creo que lleguemos a un acuerdo; es posible que el acuerdo se acabe, pero como les dije desde el primer día, vamos a renegociar el acuerdo o eliminarlo. Realmente no creo que se pueda hacer, pero vamos a ver qué pasa, están en buenas manos", apuntó ayer.
El primero que resintió de nuevo el efecto de las declaraciones de Donald Trump fue el peso mexicano, pues el tipo de cambio reaccionó al alza y se ubicó, a las 22:50 horas de ayer, en un nivel de 17.72 pesos por dólar. En un lapso de 20 minutos, la paridad del peso frente al dólar se incrementó cinco centavos.
De acuerdo con Omar Taboada, analista de Citibanamex, el tipo de cambio seguirá siendo el mejor termómetro de las negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio, debido a la exposición de las exportaciones mexicanas a Estados Unidos.
En enero pasado, el tipo de cambio incluso superó los 22 pesos por dólar, ante los temores por la retórica proteccionista de Donald Trump.
Aunque la reacción del peso fue inmediata a las declaraciones de anoche, fue moderada en comparación a otros episodios de volatilidad causados por los dichos Trump.
En Twitter, el canciller mexicano, Luis Videgaray, reaccionó a los comentarios del mandatario de EU y reiteró que la negociación seguirá.
Sin sorpresas: ya estamos en una negociación. México seguirá en la mesa con serenidad, firmeza y el interés nacional por delante.
— Luis Videgaray Caso (@LVidegaray) 23 de agosto de 2017
EL MURO
El mandatario también reiteró que "de un modo u otro" se construirá el muro en la frontera con México, "aunque tengamos que parar nuestro gobierno", esto en amenaza por si el Congreso no destina recursos.
Recordó los actos terroristas en Europa para destacar la necesidad de proteger a los estadounidenses. "La seguridad migratoria es un asunto de seguridad nacional por eso estamos estableciendo mecanismos para evitar que los extremistas islámicos ingresen a nuestro país… ¿Algunos quieren que seamos más tolerantes en el proceso?", agregó.