CIUDAD DE MÉXICO.- ¿Tiene un iPhone o una iPad?, si su respuesta es sí, lo más seguro es que usted no lo haya notado y que si se dio cuenta, más bien decidió ignorarlo, pero en sus manos ha tenido un asesor de inversión tecnológico gratuito dispuesto en su pantalla de inicio.
Se trata de la aplicación (App) Bolsa, que viene precargada en ambos equipos de forma gratuita, y que permite monitorear el comportamiento de índices y acciones bursátiles.
Una herramienta muy útil para quienes tienen inversiones en el mercado de valores, como ocurre con frecuencia en Estados Unidos, donde cerca de 600 de cada mil personas son inversionistas bursátiles, mientras que en México apenas hay un inversionista bursátil por cada mil, razón por la que suele ser una aplicación que acaba escondida en el fondo de la pantalla de inicio.
Carlos Ponce, director de Estrategia Bursátil de Ve Por Más, afirma que las aplicaciones que integran los dispositivos de Apple están pensadas, primeramente para el público estadounidense, quienes son personas que estarían invirtiendo en la Bolsa, por cultura, la empresa tecnológica pone a disposición esta aplicación que es muy útil para los estadounidenses.
Un instrumento que suelen utilizar las empresas que cotizan en bolsa para motivar a sus trabajadores son las denominadas stock options, que pueden definirse como opciones de compra de acciones. Esta modalidad proviene de Estados Unidos y consiste en posibilitar la incorporación como accionista pero con unas condiciones especiales a los directores, gerentes o empleados, con el objetivo fundamental de que el beneficiario permanezca en la compañía un largo plazo y a su vez agregue valor a la empresa.
"Este tipo de aplicaciones tiene que ver, con la cantidad de inversionistas en Estados Unidos, por ejemplo; en donde en ese país hay figuras como la stock options, donde se les permite a los trabajadores ser accionista de las empresas y si ésta cotiza en el mercado estadounidense se vuelve más interesante porque tiene la posibilidad de invertir; sistemáticamente la gente se vuelve inversionista del mercado accionario y eso obliga a requerir mayor información e interesarse por las cuestiones financieras", describe el también autor de libros sobre la educación bursátil en México.
Para Olga Vera, quien es una microempresaria en México, cuya compañía se dedica a la limpieza en corporativos o edificios, invertir en el mercado de capitales no le representa atractivo, ya que para hacer crecer su negocio, de acuerdo con sus creencias, es indispensable contar con crédito o reinvertir en maquinaria y equipo.
"Si he visto que en mi iPhone existe una aplicación desde se puede realizar un seguimiento de las acciones o valores. Sin embargo, nunca la abro porque no es mi tema de interés, lo que no quiere decir que no me interese la información económica".