Para 2018 Pemex reduciría en 31 por ciento todos sus gastos operativos a 29 mil 175 millones de pesos, según el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, lo que, de ser aprobado, pondría en peligro las finanzas de su cadena de proveedores.
En el detalle, sólo los gastos para flotas marinas de la petrolera caerían 75 por ciento.
Un análisis del banco estadounidense JPMorgan destaca que "vemos que la reducción vendrá de cortar contratos con terceros. En particular, Pemex piensa reducir en 75 por ciento el costo de sus plataformas para el 2018 lo que ha sido confirmado por nuestras conversaciones con Grupo R, Oro Negro y Latina, a quienes Pemex ya les ha suspendido varios contratos".
Para su flota a Pemex le fueron asignados en 2017, 9 mil 515 millones de pesos, que para el próximo año serían 2 mil 418 millones de pesos, si el presupuesto es aprobado como fue propuesto.
Consultada al respecto, Pemex respondió que su estrategia está basada en el Plan de Negocios 2017-2021 cuyo principal foco de acción está en los negocios más rentables y en los llamados farmouts, o asociaciones con privados.
"Prevemos continuar cumpliendo con nuestros programas de trabajo programado, y como lo ha dicho el director general de Pemex en distintos foros, basado todo en lo que mandata nuestro Plan de Negocios: alianzas que complementen nuestras capacidades y, la principal, rentabilidad", dijo la empresa nacional a El Financiero.
Preocupan las prioridades
Al respecto, el senador Jorge Lavalle del Partido Acción Nacional, expresó su preocupación con la conformación del paquete de egresos en el caso de Pemex puesto que no se le está dando prioridad a los mantenimientos de las instalaciones.
"Me preocupa no solamente el recorte en Pemex que actualmente atraviesa —independientemente de las circunstancias internacionales—, momentos difíciles financieramente para el cual requiere de ciertas inyecciones de recursos.
"También me preocupa el hecho de que hemos tenido varios incidentes en materia de mantenimiento que han causado pérdidas humanas que han sido materias que han tenido que ver directamente con mantenimiento. No podemos permitirnos que cualquier tipo de recorte ponga en riesgo la seguridad", dijo el integrante de las comisiones de Hacienda y Energía de la Cámara Alta.
Cabe recordar, que de acuerdo con la propuesta, se solicitó para la petrolera estatal un gasto programable de 391 mil 946 millones de pesos, 4.6 por ciento menos que el aprobado para este año en términos reales, con el cual la petrolera deberá producir más.
Para Luis Miguel Labardini, analista de Marcos y Asociados, será punto menos que imposible que la producción incremente (como pronostica la Secretaría de Hacienda y Crédito Público) ante un menor presupuesto para perforación y operaciones.
"Me sorprende el menor presupuesto porque en las últimas semanas el Secretario de Hacienda dijo que la producción había tocado fondo en 2017 y que iba a empezar a subir en 2018, y la única forma de que la producción se recupere es perforando más pozos y eso se hace con más inversión.
"La única alternativa sería que Pemex está previendo que algunos de los pozos que van a perforar van a ser altamente productivos, pero no se puede producir más sin perforar", dijo Labardini.
Trión queda fuera
En total, el recorte presupuestal proyectado para la subsidiaria Pemex Exploración y Producción, que prácticamente mantiene a la petrolera nacional, sería de sólo tres por ciento para 2018, sin embargo, representa dejar fuera del libro contable siete mil 852.5 millones de pesos.
Esta situación también le hará dejar fuera a la petrolera siete proyectos de exploración y evaluación, entre los que destacan Trión, así como el desarrollo del campo gasífero Kunah, ambos ubicados en aguas profundas del Golfo de México.
En el caso de Trión, la decisión es congruente con el contrato de asociación que firmó la petrolera nacional con la australiana BHP Billinton, quien invertirá los recursos.
Al respecto, Ramses Pech, analista de Caravia y Asociados, confirmó el incremento en la cancelación de contratos y actividades de proveedores para el próximo año desde Campeche, principal puerto petrolero del país.
"Muchos de los contratos van a ser cancelados y otros van a tener pocos pozos por la poca actividad que se va a tener en los próximos años", explicó.