Los ingresos extraordinarios para el gobierno federal derivados del remanente del Banco de México (Banxico) resultan positivos para las finanzas públicas, ya que disminuirán el nivel de la deuda, lo que implica un punto a favor para la calificación soberana del país.
Al cierre del ejercicio fiscal de 2016 el banco central registró un remanente de operación de 321 mil 653 millones de pesos, lo que implica un monto histórico, el cual fue entregado al gobierno federal, conforme dicta la Ley de la institución, que en su mayoría se destinará al pago de la deuda.
Alejandro Cervantes, subdirector de análisis económico de Banorte, indicó que el hecho de que el 70 por ciento del remanente se utilice para la reducción de la deuda implica que el saldo histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público en este año podría cerrar en alrededor de 49.2 por ciento del PIB, por debajo del 50.2 por ciento que se tiene estipulado.
"Esto va a ser muy benéfico para las perspectivas de calificación crediticia", destacó.
Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays, indicó que el monto del remanente fue mayor a lo que se esperaba y es definitivamente positivo, ya que contribuirá a disminuir el nivel de la deuda.
Cervantes explicó que el histórico remanente se debe en parte al buen manejo de las reservas internacionales que realizó Banxico durante 2016, pero sobre todo a la fuerte depreciación del tipo de cambio que registró la divisa mexicana el año pasado.
"(El remanente) es en función de la valuación de la reservas entre el tipo del cambio del cierre del año anterior y el del cierre del ejercicio más reciente. Dado que el peso se depreció, la valuación en pesos de la reserva es mayor y eso se considera una ganancia operativa y va a resultados en los estados financieros del Banco Central", detalló Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays.
Los analistas coincidieron en que estos ingresos adicionales para el gobierno federal resultan positivos para las finanzas públicas.
IMPACTO LIMITADO
Los analistas advierten que los beneficios del remanente sobre el déficit fiscal para el ejercicio de 2017 serán limitados.
En el agregado, precisó Cervantes, no cambiará el déficit fiscal, pero sí habrá una fuerte reducción en la deuda del sector público o en el sentido más amplio, en el saldo histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público para el presente año.
Por su parte, Oviedo afirmó que aunque es un elemento positivo, no cambiará radicalmente la perspectiva de las finanzas públicas por ser un ingreso no recurrente. Expuso que si el banco central tiene activos denominados en dólares, que ahora valen más en pesos, hace sentido que se neutralicen con algo de deuda externa que tiene el gobierno, que también ya vale más en dólares, "en el efecto neto, no hay ningún cambio en riqueza", dijo.
EN 2017 PODRÍA NO HABER REMANENTE
Ante la tendencia que ha mostrado el tipo de cambio durante 2017, que se ha apreciado en al año 10.7 por ciento frente al dólar, es probable que en este ejercicio el remanente de Banxico se reduzca o sea nulo.
Jorge Gordillo, director de análisis económico de CiBanco, advirtió que es posible que no haya remanente en 2017. "Este no es un recurso que llega constantemente, llegó el año pasado y llega este año por la depreciación fuerte, por lo que ganó Banxico por sus reservas en dólares. Pero es probable que en los próximos años ya no lo tenga".
Banxico ha advertido implícitamente sobre su expectativa de un menor remanente para el año en curso, el especialista de Ci Banco destacó que llama la atención que el Banco Central ya ha guardado una parte de sus ganancias de 2016 para hacer una reserva para protegerse en caso de pérdidas.
"De alguna manera Banxico está viendo ya mejores momentos para el tipo de cambio para los próximos meses. Banxico se está protegiendo para ello", dijo.