Renaissance Oil se convirtió en la primer productora de crudo extranjera en México, al comercializar por primera vez petróleo extraído de un campo mexicano.
La producción aproximada de la compañía fue de mil 700 barriles diarios en tres campos mexicanos, por los que recibió un precio promedio de 39.59 dólares por barril para su producción de petróleo y de 2.77 por millón de pie cubico para la de gas natural, según información de la propia petrolera.
La compañía informó que después del pago de regalías e impuestos tienen un flujo positivo de efectivo. Además, ofreció aumentar el valor de las regalías en 80, 78 y 56 por ciento, valores con los que ganó estos tres campos.
Los campos que reportaron esta producción son Mundo Nuevo, Topén y Malva, ubicados todos en Chiapas, los cuales le fueron adjudicados a esta empresa canadiense en la Ronda 1.3.
Estos campos eran propiedad de Pemex por lo que ya estaban en producción y desde que se firmaron los contratos el 26 de mayo, Renaissance Oil se encuentra en un periodo de transición con Pemex en la que la petrolera nacional le está transfiriendo todas sus operaciones.
Craig Steinke, director general de la empresa, señaló que le complace el nivel de detalle de los reportes de producción de sus tres nuevas áreas en México.
"Estamos complacidos con la calidad de la detallada información recibida y las operaciones competitivas, de bajo costo de nuestras operaciones en nuestras propiedades.
"A medida que Renaissance pasa el periodo de transición a nuestras propiedades para operarlas nuestro foco es el optimizar las eficiencias de campo e incrementar la producción y el flujo de efectivo", señaló el directivo para un comunicado de la empresa.
La compañía se anuncia ya como la segunda mayor productora de petróleo del país detrás de Pemex.