Las tomas de capital de Petróleos Mexicanos (Pemex), como la que realizó Hacienda por 50 mil millones de pesos este viernes, podrían repetirse el año entrante, a pesar de la aprobación de la reforma energética que buscaba darle mayor autonomía presupuestal a la paraestatal.
Fluvio Ruiz Alarcón, exconsejero profesional de Pemex, aseveró que tomas similares de dinero serán comunes el próximo año, en forma de dividendos.
"Aunque la autonomía presupuestal se modifica el año que entra, se aprobó en el nuevo régimen un dividendo especial, a partir del cual veremos seguramente tomas como estas en el futuro, porque este dividendo lo aplica Hacienda y recordemos que la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo estableció que es el equivalente a 4.7 por ciento del PIB el que deberá ingresar al Estado proveniente de los ingresos del sector petrolero", dijo el exconsejero de Pemex.
El viernes pasado Pemex informó que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) había fijado un aprovechamiento para la Nación a cargo de la petrolera por 50 mil millones de pesos.
La empresa productiva del Estado informó a la Bolsa Mexicana de Valores que lo anterior fue con la finalidad de realizar un manejo más eficiente de los activos financieros del sector público federal.
Ruiz Alarcón apuntó que la toma de capital revela la tremenda dependencia que tienen las finanzas públicas de los ingresos petroleros.
"Esto continuará en el mediano plazo, al menos mientras no exista una reforma fiscal profunda y progresiva, seguiremos dependiendo de los ingresos petroleros", dijo.
Gonzalo Monroy, analista de la consultora energética GMEC, explicó que para Pemex podría haber un impacto por esta medida.
"Lo que está haciendo el gobierno, es como se dice coloquialmente, pasar dinero de una bolsa a otra, porque a pesar de ser empresa productiva del Estado, al final es una empresa del Estado, pero para Pemex sí habría un impacto al restarle capital", anticipó el experto.
Refirió que es posible que el dinero que tomó Hacienda de Pemex sea para hacer frente a los compromisos no cubiertos de diciembre.
Recordó que existe un antecedente en los años ochenta, cuando el gobierno retiró capital de Pemex, para hacer frente a sus pagos.
"El gobierno en plena crisis de pagos tomó parte del patrimonio de Pemex para hacer frente a sus compromisos de la deuda externa", dijo.
Por su parte, Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), señaló que la trasferencia estaría relacionada con el gasto acelerado del gobierno en los últimos meses y la caída en los precios del petróleo.
"Desde agosto y septiembre hay un gasto muy alto, incluso pareciera que la Tesorería trae un problema de liquidez importante".
"Se traían excedentes en el año, porque el precio del petróleo, incluso, estuvo por encima de lo pronosticado, lo que permitió al gobierno formar un 'colchón' que no esperaba utilizar, un 'colchón' que se le agota, con el gasto de agosto, septiembre y octubre, se le cae la liquidez", explicó.
Señaló que a reserva de ver el reporte del último trimestre de finanzas públicas que se presenta en enero, la lectura que da el CIEP a la transferencia, es que el gobierno está sacando deuda de corto plazo a través de Pemex, y puenteando la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.