Tarifas similares o más bajas y, sobre todo, tiempos mucho más cortos en los trayectos de viaje se han convertido en las principales causas para que cada vez más personas decidan moverse mediante avión en lugar de hacerlo por autobús.
Las aerolíneas alcanzaron en 2016 una participación de 1.39 por ciento dentro del mercado total de viajeros en México. Si bien esto representó una expansión de apenas 13 puntos base contra el 1.26 por ciento de 2015, en volumen significó haber movido 3.9 millones de viajeros más, de acuerdo con datos de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
Expertos consideran que las aerolíneas ganan pasajeros a autobuses, principalmente en las rutas más demandadas, debido a los precios competitivos que ofrecen.
Entre estas rutas consideraron a la México-Guadalajara; Guadalajara-Monterrey; Monterrey-Ciudad de México, y las que conectan a estas grandes metrópolis con los principales destinos turísticos del país. Incluidas la México-Cancún; Monterrey-Cancún; Guadalajara-Los Cabos y México-Puerto Vallarta, entre otras.
Enrique Beltranena, director general de Volaris, señaló en conferencia telefónica con analistas que las encuestas a bordo que realizaron en febrero arrojaron que aproximadamente entre el 6 y 8 por ciento de los viajeros que utilizaron alguno de sus aviones lo hicieron por primera vez.
"Hemos aprendido que cuando las personas deciden volar y no ocupar el autobús, el tiempo que toma hacer el viaje tiene más peso que la tarifa", dijo el ejecutivo.
En 2016 se transportaron 2 mil 971 millones de personas por autobús, 1.8 por ciento más que un año antes. Por su parte, el número de viajeros por avión en México alcanzó los 41.8 millones, para un incremento de 12.5 por ciento, según datos de la DGAC.
"Por un lado el transporte por autobús es un sector que ha madurado en México, al menos eso sugieren las tasas de crecimiento similares al PIB y su amplia oferta, en cambio el desarrollo de las aerolíneas nacionales ha sido mayúsculo en los últimos años", señaló Mauricio Martínez, analista de Grupo Bursátil Mexicano (GBM).
Entre el primer trimestre de 2013 y el mismo lapso de 2017, periodo en que tuvo lugar la guerra de tarifas áreas, los precios de los autobuses foráneos subieron 26.6 por ciento, muy por arriba del incremento de 4.5 por ciento de las tarifas aéreas, según el INEGI.
Acorde con un sondeo de El Financiero, Volaris y VivaAerobus –consideradas aerolíneas de bajo costo y las que más han ganado mercado en México– tienen en promedio boletos con precios 11 por ciento más bajos que los de Primera Plus, TAP, ETN y ADO.
Mientras un vuelo de la CDMX a Guadalajara lleva hasta cuatro horas con una línea aérea, al contar el tiempo de espera necesario en el aeropuerto, en autobús se lleva siete horas. Por su parte, un viaje de la CDMX a Monterrey en autobús implica nueve horas y en avión hasta cuatro horas. Desde luego, sin contar con las demoras en el AICM.
Las aerolíneas de bajo costo ofrecen boletos más accesibles porque tienen un costo de combustible por pasajero inferior hasta en 14 por ciento, comparado con el autobús.
Hace dos años, cuando VivaAerobus buscó entrar a la Bolsa Mexicana de Valores, detalló en su prospecto de colocación que del total de pasajeros que viajan por autobús, 300 millones representaban una oportunidad para ser captados por las aerolíneas.
Las líneas aéreas también van por el mercado de viajeros de los autobuses de lujo que en términos de participación es un 3 por ciento o lo equivalente a unos 80 millones de viajes, agregó Martínez.
"Aún hay mitos alrededor del avión, posiblemente hay gente que le da miedo, pero el más significativo es el precio. La gente aún piensa que si viaja en una línea aérea le va a salir más caro y la diferencia ya no es tanta", expuso el experto.
Un vuelo de la CDMX a Tuxtla Gutiérrez por Volaris cuesta 599 pesos, 38 por ciento más accesible que los 970 pesos por ADO. De México a Monterrey volar en VivaAerobus tiene un precio de 532 pesos, 5 por ciento más económico que con TAP.
Marco Montañez, analista de Vector, opinó que en los últimos tres años las aerolíneas aprovecharon las buenas condiciones económicas en México para expandir su oferta de asientos, lo que aunado a menores tarifas les permitió subir más pasajeros a sus aviones el año pasado.
De 2013 a 2016 la oferta de asientos de Aeroméxico se incrementó 33.4 por ciento; la de Volaris 53.3 por ciento y la de Interjet 44 por ciento, según sus reportes operativos.
"Ante la fuerte baja en combustible pudieron reducir sus costos y ello les permitió ser más competitivas en tarifas para ganar mercado. Hay una guerra de precios entre aerolíneas pero que también involucra a las líneas de autobuses en algunas rutas", agregó el experto.
*Si quieres ver el gráfico completo, da clic en el siguiente enlace*