La regulación hecha en la Ciudad de México para las plataformas de transporte abrió "un mundo de oportunidades", al lograr incrementar su flota de diciembre a la fecha un 300 por ciento y la posibilidad de seguir con su crecimiento, estimó el director de Cabify en el país, Alejandro Sisniega.
Sin embargo, asegura que la estrategia de la compañía no es inundar la ciudad de vehículos, sino aumentar los conductores de acuerdo con la demanda que el mercado exija, a fin de reducir el tiempo de espera de los usuarios, sin que los conductores y asociados vean afectados sus ingresos.
El directivo indicó que en el periodo de la contingencia ambiental en la capital del país se aumentó la base de unidades un 280 por ciento, mientras que de diciembre a la fecha las unidades han crecido un 300 por ciento.
"Tenemos una capacidad de aumentar nuestra flota muy grande, podemos meter el doble de vehículos en los próximos tres meses si es necesario, sin embargo, no lo hacemos porque afectaríamos el ingreso promedio del resto de los conductores", refirió.
Expuso que están en una industria que crece a doble dígito mes con mes, "estamos en un mercado monstruoso hacia delante y tenemos proyectado que seguiremos creciendo así para el siguiente año, incluso también en 2018".
Alejandro Sisniega explicó que en la actualidad tienen una cobertura total en la capital, excepto en ciertos puntos que han considerado de riesgo para los conductores; además tienen un tiempo estimado de arribo de siete minutos, pero la meta es llegar en cinco minutos.
"Una de las cosas que vigilamos siempre fueron los conductores; para nosotros tenemos dos clientes: los usuarios y los conductores, y debemos de buscar que ambos interactúen de una manera justa, tener una tarifa justa para el usuario, pero también que tengamos un costo de viaje, un ingreso justo para los conductores", dijo.
En este sentido, expuso que desarrollaron un modelo para que su oferta nunca esté por encima de la demanda y de esa manera garantizar un ticket medio a los conductores, por lo que limitan el ingreso de unidades a la plataforma y no la liberan hasta que el mercado lo requiere.
Sisniega consideró que eso tiene un lado positivo para el conductor, pues al haber menos vehículos disponibles éste hace más viajes al día y puede tener un ingreso mayor, y si bien algunos usuarios se quejan de que las unidades tardan mucho, es preferible una espera mayor a tener la ciudad inundada de vehículos.
Precisó que los choferes pueden llegar a tener ingresos por siete mil 500 pesos, más bonos, mientras que las ganancias de los inversionistas son entre siete y ocho mil pesos, y los conductores independientes ganan por arriba de los 20 mil pesos.
Indicó que la tarifa de la competencia es muy baja y no se hace rentable para los conductores, a menos de que sea en hora pico, por la variable de tiempo y distancia, situación que ha generado una ligera migración de conductores hacia Cabify.
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