La automotriz Ford reportó en 2017 su peor desempeño en ventas, producción y exportación de los últimos 8 años en México, reflejo de su cambio de enfoque hacia vehículos de mayor equipamiento y, por ende, de precio más alto.
Datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) revelan que la marca del óvalo azul armó en el país 315 mil 455 vehículos el año pasado, lo que representó una caída de 19.2 por ciento comparado con 2016 y el mayor decremento en ocho años.
Del lado de las exportaciones, la firma mandó de México a otros países 307 mil 378 coches, lo que significó una disminución de 18.4 por ciento contra lo registrado en 2016 y su mayor baja desde 2009.
Además, en el mercado interno la firma que encabeza Gabriel López vendió 81 mil 698 unidades, 17.7 por ciento menos que durante 2016, lo que también representó la caída más pronunciada 8 años.
La baja venta en México, según especialistas, fue por apostar a vehículos de mayor valor, mientras que la reducción en la actividad de producción y exportaciones es por sus cambios en líneas de fabricación.
"Los mexicanos son muy sensibles al tema de precios. Los vehículos de volumen de Ford ofrecen más equipamiento que otras marcas, pero al final sus precios son elevados frente a la competencia", explicó Mauricio Kuri, catedrático del Tecnológico de Monterrey y especialista de la industria. Destacó que la empresa también modificó sus planes de venta en el país.
Durante el año pasado, la firma anunció que renovó 40 por ciento de su red de distribuidores con la finalidad de ofrecer un nuevo rostro al mercado; eso significa que varios puntos de venta estuvieron inactivos por algunos días. Fuentes de la empresa descartaron que exista un cierre de agencias.
En un correo previo enviado a El Financiero, la automotriz estadounidense explicó que su débil desempeño en el país es reflejo de un cambio en su estrategia, al buscar comercializar unidades con mayor equipamiento, las cuales son de mayor valor.
"Prueba de ello son las tecnologías en materia de seguridad que ofrecemos en todo nuestro portafolio en México: 85 por ciento de nuestros productos tienen control de estabilidad y 95 por ciento cuenta con ABS y doble airbag", explicó.
En producción, analistas de Morgan Stanley refieren en medios americanos que la firma enfrenta a nivel global una alineación actual de su portafolio de vehículos que necesita ser renovada y la desaceleración de las ventas a escala mundial.
Tan sólo en Estados Unidos, su principal mercado, redujo la comercialización de autos 1.9 por ciento en 2017, según Wardsauto. En esa nación se tuvo una menor demanda de vehículos compactos, que son los que más hace Ford en México.
A inicios de 2017, Ford canceló la construcción de una planta en San Luís Potosí y optó por invertir más en investigación y desarrollo.
Hasta el cierre de la edición Ford no dio respuesta a una solicitud de información de El Financiero.