Los inversionistas canadienses de la Bolsa de Toronto retomaron su confianza en México, pues durante el primer semestre de este año destinaron 300 millones de dólares a proyectos en el país, el doble de todo lo inyectado durante 2013.
En entrevista con El Financiero, Carlos Espinosa, director de desarrollo de negocios de la Bolsa de Toronto, explicó que el año pasado se obtuvieron 150 millones de dólares en capitales canadienses para extracción mineral en México, 85 por ciento menos que lo captado en 2012, ante la debilidad económica y la amenaza de nuevos impuestos a empresas del sector.
"Pero ahora hay más confianza, el precio de los metales no ha mejorado, aunque se encuentra estable, mientras que el anuncio de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de no aplicar nuevos impuestos calmó los nervios de los inversionistas", apuntó.
De acuerdo con la Secretaría de Economía, las empresas mineras extranjeras duplicaron sus inversiones en México al sumar 854 millones de dólares durante el primer semestre de 2014, poco más del doble de lo que se registró en igual periodo del año pasado.
"Sin embargo, gran parte de estos capitales son para proyectos maduros (en nivel de extracción) o exploraciones avanzadas, lo cual habla de que el valor de los metales en los mercados internacionales aún no genera confianza", explicó.
El incremento de la inversión del sector minero en México fue explicado por el presidente Enrique Peña Nieto como resultado de una labor de convencimiento en ferias internacionales por parte del gobierno.
"El sector minero enfrentó un entorno internacional caracterizado por una demanda moderada y una tendencia a la baja en los precios de los minerales. En este contexto, fue indispensable llevar a cabo una activa política de participación en eventos de carácter nacional e internacional para fomentar la inversión", expuso el mandatario en su Segundo Informe de Gobierno.
México frente a otros países mineros como Perú sigue siendo de mayor confianza, a pesar de que en Perú se ha vuelto un estado pro minería.
Espinosa explicó que Perú ha hecho las cosas bien en regulación minera; sin embargo, siguen enfrentando problemas con las comunidades con los llamados permisos sociales.
