Torre BBVA Bancomer, Torre Reforma y Reforma 509 se encuentran entre los cinco edificios inteligentes en proceso de construcción más sofisticados de México, por la tecnología que han usado en sus procesos constructivos, así como en la autonomía de gestión y operación que tendrán, calificaron expertos.
La segunda etapa de Plaza Carso y el complejo de Grupo Danhos en Toreo, complementan el grupo ubicado en la Ciudad de México que cubre altas especificaciones técnicas, que buscan el confort de los usuarios finales y los ubica entre los más amigables con el ambiente, según el Instituto Mexicano del Edificio Inteligente (IMEI).
Entre las innovaciones que traerán este tipo de proyectos están los materiales de construcción, como películas que cubren los cristales de los edificios, pero que permiten la entrada gradual de la luz del sol, para no afectar la temperatura interior y reducir el uso de aire acondicionado, señaló Alonso Rivera, presidente del IMEI.
"Si la iluminación exterior se nubla o pasan nubes, los sensores van detectando cuánta iluminación natural entra, sí es más reducida empieza a encender la energía eléctrica gradualmente", indicó Andrés Vergara, director del Despacho V&F Arquitectos.
En el caso de elevadores están equipados con computadoras que registran horarios y movimientos del personal para ponerse en periodos de actividad o de descanso y reducir el uso de energía eléctrica.
Vergara afirmó que ser 'inteligente' en México ha dejado de ser un valor agregado y ahora es un requisito, sobre todo, para edificios de oficinas de alta calidad.
"El mercado los ha solicitado. A partir del TLCAN empezaron a venir compañías internacionales a México a poner corporativos y necesitaban tener edificios de calidad internacional", indicó Vergara.
Con la reforma energética, este tipo de edificios serán el común denominador y no sólo en espacios de oficinas, sino en hospitales, centros comerciales y edificios residenciales, previó Vergara.
En la Ciudad de México existen aproximadamente 7 millones de metros cuadrados de edificios de oficinas, de ellos, 3 millones son catalogados como B y C, es decir, no cuentan con el nivel de automatización o inteligencia, de acuerdo con Jorge Hagg, director de desarrollo de producto de Scheneider Electric y expresidente del IMEI.
Los restantes 4 millones de metros cuadrados corresponden a edificios A o A+, que tienen algún nivel de inteligencia en cuanto a automatización, seguridad o infraestructura. Aunque la concentración está en el Distrito Federal, se ven cada vez más edificios con algún grado de inteligencia en Monterrey y Guadalajara.
"Hemos contado más de 20 megaproyectos que están en Guadalajara, León, Querétaro y Ciudad de México", afirmó Hagg.
Torre BBVA tendrá sistemas de bajo consumo de energía y sistemas integrados automatizados. En el caso de Plaza Carso, la parte del proyecto que está en operación cuenta con automatización integrada que controla el conjunto de tres edificios, por lo que se espera que el nuevo inmueble cuente con iguales características.
El Toreo tendrá sistema de tratamiento de agua y optimización de energía eléctrica, mientras que Torre Reforma contará con aprovechamiento de agua de lluvia y uso eficiente de agua, entre otros.
1. Inteligencia básica. Sistema elemental de automatización del edificio, el cual no está integrado. Existe automatización de la actividad y servicios de telecom, aunque no están integrados.
2. Inteligencia media. Sistema de automatización de la actividad, sin una completa integración de telecomunicaciones.
3.Inteligencia máxima o total. Los sistemas de automatización del edificio, las telecomunicaciones y la actividad se encuentran totalmente integrados.