MILWAUKEE.- Con menos de un año en operación, el consulado de México en Milwaukee se enfrenta ya a uno de los retos más difíciles: plantar cara a un sheriff de corte antimigrante, decidido a lanzar redadas contra miles de mexicanos sin papeles.
Es aquí, a 3 mil kilómetros de la frontera, donde se va a suscitar una de las más duras batallas migratorias en la era Trump: como tocó al consulado de Phoenix en los años de Arpaio, ahora toca al de Milwaukee con el sheriff Clarke.
"Estamos preparándonos para atender a la población en la zona de los grandes lagos", admitió el cónsul Julián Adem. "Hemos reforzado nuestra área de protección consular y los contratos con abogados migratorios", agregó.
Adem detalló que el ingreso de la policía del condado de Milwaukee al plan 287G emula la estrategia seguida en su momento por Arpaio para imponer el régimen migratorio más duro de Estados Unidos, pues incluso el Departamento de Justicia investigó al alguacil por violaciones a los derechos humanos.
"No olvidemos que el sheriff Arpaio usó el acuerdo 287G para que sus oficiales realizaran redadas en los centros de empleo y arrestaron a cientos de mexicanos", recordó.
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