Sólo 300 funcionarios y un presupuesto de 160 millones de pesos tiene la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) para atender las denuncias por delitos electorales en todo el país.
En entrevista con Javier Risco, en La Nota Dura, el fiscal Santiago Nieto reconoció que sus recursos son insuficientes para llegar a las elecciones de 2018, ya que los partidos reciben más financiamiento que la propia Fepade.
"Por ejemplo, la delegación de Sedesol en el Estado de México tiene 380 funcionarios", dijo Nieto, "es importante fortalecer a la fiscalía y a las fiscalías locales.
"Por disposición legal, los congresos de los estados tenían la obligación desde 2014 de crear fiscalías electorales en cada entidad federativa y hoy solamente 16 estados cuentan con una", agregó.
Entre las denuncias que se registraron en las elecciones de 2017, las más comunes fueron el condicionamiento de programas sociales, la compra de voto y el financiamiento ilícito, dio a conocer el fiscal.
Además, en los cuatro procesos electorales se registraron 756 carpetas de investigación, de las cuales 306 indagatorias en el Estado de México. Sin embargo, en Veracruz aún no se han resuelto las denuncias de la época de Javier Duarte.
"En el estado de Veracruz son condiciones que heredamos del señor (Javier) Duarte, estamos hablando de que en este proceso electoral se consignaron 300", comentó Santiago Nieto.
Mientras el turismo electoral disminuyó, el financiamiento ilícito se volvió un problema estructural general de los partidos.
"Las denuncias tienen que ver con retención de salario a los trabajadores y es un asunto que encontramos en Texcoco con Morena, pero también lo encontramos en Chihuahua y Torreón con el PRI, en Monclova con el PAN.
"Se trata de financiamiento ilícito en virtud de que existe una prohibición legal para que la federación, estados o municipios le den recursos a los partidos políticos", concluyó.
RIQUELME NO ASUMIRÁ COMO GOBERNADOR
El candidato de Morena para la gubernatura de Coahuila, Armando Guadiana dijo que harán lo posible para que Miguel Ángel Riquelme no asuma el cargo como gobernador.
"La constancia se la van a entregar a un gobernador espurio, pero el descontento quedó manifiesto el día que organizamos la marcha", dijo Guadiana, "Riquelme no se va a sentar en la silla de gobernador".
El empresario y candidato de Morena dijo que el proceso inició más desde el nombramiento de los consejeros del Instituto Electoral de Coahuila, por ser afines al PRI y al actual gobernador, Rubén Moreira.
"La gente ya no quiere una continuidad de 12 años de gobierno de los hermanos Moreira", agregó Guadiana, "en la tierra de Francisco I. Madero no vamos a permitir la imposición de un gobernador más".