Alrededor de medio millar de personas vestidas de blanco, se congregaron en el centro de Ocotlán, luego que la semana pasada se registró una balacera que dejó un saldo de 11 personas muertas.
Desde el primer momento de la concentración de habitantes y ciudadanos comunes; enfatizaron en que no hay tintes políticos detrás; expone uno de los organizadores German Sadday, "no venimos sólo a manifestarnos, únicamente a pedir paz y la
desmilitarización de nuestro municipio, por que tengamos una seguridad real".
El saldo del enfrentamiento fue de 11 muertos: cinco policías y seis civiles; de éstos, tres serían integrantes del Cártel de Jalisco, Nueva Generación, quienes emboscaron a los policías federales. Además de 29 vehículos y 31 fincas dañadas.
Entre los manifestantes se encontraban familiares de los civiles muertos, quienes acusan que nadie de los niveles de gobierno se ha acercado a ellos para resarcir los daños, a pesar que el alcalde Enrique Robledo afirmó que el ayuntamiento apoyaría a los deudos;
En tanto personal policial estatal y federal, y hasta militar, ha hecho irrupciones en fincas, sin órden de cateo, en busca de presuntas personas vinculadas al grupo delictivo, lo que ha incrementado la molestia ciudadana.
Trasciende que se han asegurado al menos 10 fincas en las que se han asegurado vehículos de lujo, en una de las intromisiones, en un salón de fiestas, se incautaron una leona, un tigre y un oso; además que se han retenido a varias personas sin que ésto se reporte debidamente.
Sobre los daños en las viviendas, los afectados siguen sin recibir apoyo para reparar las paredes que fueron blanco de los impactos de bala; aún cuando el gobernador del estado Aristóteles
Sandoval informó que el organismo Provictima se encargaría.
Una familiar del adolescente Isaac Esau Solís Ornelas, quien murió baleado cuando regresaba de la escuela junto a su padre, dijo "con nada se repara la pérdida, lo que deberían de hacer es ponerse a trabajar, no se han acercado con nosotros, ni una llamada para darnos el pésame o
explicarnos nada".
La Ley General de Víctimas señala que quienes sean agraviados, tienen derecho a conocer la verdad de los hechos.
Los habitantes de Ocotlán han seguido siendo víctimas; es el caso de las extorsiones telefónicas; se trata de un supuesto comandante que les pide información de la balacera, y posteriormente les exigen dinero amenazándolos.
Al momento sólo hay un detenido: Luis Covarrubias González, quien fue turnado ante un juez federal.
En medio de las tantas irrupciones ilegales por parte de los policías en Ocotlán, miembros de la delincuencia hacen de las suyas; y es que un grupo de sujetos armados entraron ayer por la noche a la casa de Angel Eduardo Jiménez Guerrero; lo victimaron a balazos y luego huyeron a bordo de un vehículo BMW X5 de color gris.
Nacional