Ayer, el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores cayó nuevamente. Ahora el retroceso fue de poco más de 2 por ciento.
Desde el pasado 16 de octubre, fecha en la que el índice llegó a poco más de 48 mil puntos, la caída ya es de más de 10 por ciento.
El 15 de octubre se reveló la redacción de la pregunta sobre el nuevo aeropuerto.
De acuerdo con datos del Banxico, al cierre del mes de septiembre, el valor de capitalización de la Bolsa fue de 8.9 billones de pesos.
Al día de ayer, el valor estimado es de 7.7 billones de pesos.
Es decir, la pérdida de valor de la Bolsa en el último mes y medio aproximadamente es 1.2 billones de pesos.
Es decir, los inversionistas han perdido 26 mil 600 millones de pesos al día en los últimos 45 días aproximadamente.
Pero, en fin, pueden estar exagerando.
La deuda externa bruta del país, al tercer trimestre del este año, ascendió a 343 mil 780 millones de dólares, según datos de Banxico.
Su valor en pesos al 15 de octubre era de 6.46 billones, con un dólar que se cotizaba entonces a 18.84 pesos.
Al día de ayer, esa deuda equivalía a 6.98 billones de pesos.
Es decir, en un mes, su valor en pesos se incrementó en 521 mil millones, por efecto de la depreciación de nuestra moneda frente al dólar.
Pero no, quizás los mercados estén exagerando.
Los bonos soberanos del país, a plazo de 10 años, cotizaban el 15 de octubre a una tasa de 8.1 por ciento al año. Ayer se negociaron en 8.87 por ciento.
Ese incremento de tres cuartos de punto, en un mes, equivale a pagar un extra de 2 mil 570 millones de dólares por año por la deuda externa del país… además del efecto por el ajuste cambiario.
Carlos Urzúa es un personaje que se distingue por su serenidad. Ni se va a alarmar, ni va a caer en pánico por las cifras anteriores.
El futuro secretario de Hacienda va a ponderar los hechos.
Por ejemplo, sabe que el dólar se encareció en promedio en 1.6 por ciento frente a las principales monedas del mundo. En México, el encarecimiento fue de 8 por ciento. Es decir, el efecto doméstico fue de "sólo" 6.3 por ciento.
Igualmente, la Bolsa de Nueva York no sólo no cayó en ese lapso, sino que subió 0.5 por ciento. En México observamos un desplome de 10.2 por ciento.
En fin, creo que cualquier financiero que estuviera en los zapatos de Urzúa o de Arturo Herrera, estaría muy preocupado, salvo que pensara que realmente los mercados son unos exagerados.
Un audio, atribuido a Tomás Ruiz, exfuncionario de la SHCP y de Veracruz, que ha circulado profusamente por redes sociales, narra una conversación con un alto directivo de uno de los dos bancos más grandes de México.
Refiere que le dijo, respecto a los próximos funcionarios de Hacienda: "Tomás, no tienen idea de dónde apretar el botón para despegar. No saben por dónde empezar". Y refiere un escenario cambiario para los próximos 12 meses de entre 23 y 25 pesos por dólar.
Creo que la grabación exagera. Si así vieran las cosas los mercados, su comportamiento sería diferente.
Pero, lo que los resultados en la bolsa, en las tasas, en el dólar reflejan, eso sí es un hecho, no opiniones ni versiones de terceros.
Quien lo minimice, empezando por el gobierno, tendrá que pagar muy caras las consecuencias.