Este martes, la Unión Europea impuso una multa de 2 mil 400 millones de euros a Google por distorsionar los resultados de sus búsquedas y favorecer a Google Shopping, frente a otros servicios de compra más pequeños.
Dicha multa es la más elevada para una sola compañía por infringir las normas de competencia que ha impuesto la UE, desde los mil 60 millones de euros impuestos a Intel en 2009.
La decisión contra Google guarda una relación directa con la naturaleza misma de los negocios de la empresa, lo que le podría causar un impacto con consecuencias como estas:
1. ¿Es importante para Google?
Más allá de la multa, esencialmente, Google tiene que cambiar cómo trabaja su función de búsqueda. Es como decirle a un fabricante de automóviles que cambie la forma en que se conducen sus coches. Teniendo en cuenta lo lucrativo que ha sido promocionar sus compras comparativas, constituye un golpe.
2. ¿Qué sigue ahora?
Google ha dicho que está sopesando una apelación. En circunstancias normales, las apelaciones se utilizan para postergar una resolución, en algunos casos, permitiendo que los negocios continúen como de costumbre, mientras que los abogados se dedican a lo suyo. Por ejemplo, una sanción impuesta a Intel hace ocho años todavía está esperando el resultado de la apelación.
Sin embargo, en este caso, la UE ha emitido esencialmente una orden de cesar y desistir contra Google. Incluso si apela, tendrá que cambiar sus prácticas comerciales en 90 días.
3. ¿Cómo llegó la UE a la cifra de 2.4 mil millones de euros?
Es complicado. La UE ha establecido directrices sobre cómo determina una multa.
El punto de partida es que el "importe final de la multa no podrá, en ningún caso, exceder del 10 por ciento del volumen de negocios total del ejercicio anterior", que en el caso de Alphabet es de 90.2 mil millones de dólares.
A partir de ahí, la multa se basa en "el 30 por ciento de las ventas anuales de la empresa a las que se refiere la infracción", en este caso los ingresos de Google por su servicio de comparación de compras en los 13 países europeos involucrados en la investigación, ello multiplicado por el número de años de infracción.