CIUDAD DE MÉXICO.- El rostro de un gran chamán que por medio de su corazón invoca a los espíritus, para que con conjuros doten de paz la vida de las personas, se aprecia en el diseño de la botella arte objeto de mezcal Meshico.
Se trata de una botella de cristal y bañada en platino, considerada por el Guinness World Record como la más fina, cara y exclusiva del mundo, con un valor en el mercado de 55 mil euros, más de un millón de pesos, la cual fue vendida a un ciudadano francés, dueño de la colección más importante de vinos y licores en el mundo.
La botella, una pieza única e irrepetible, "es un homenaje a los campesinos que poco tributo se les rinde al final del día, una pieza minimalista, artística, terminada en un baño de platino", dijo Fernando Altamirano, empresario y creador del proyecto.
Por su parte, Alejandro Gómez Oropeza, artista plástico y diseñador de la obra El conjuro del chamán, título que da nombre a su óleo y la figura en la botella, refirió que el gran chamán "es un personaje que sabe más que el pueblo, con capacidades para contactar al más allá y por medio de este conocimiento, sanar y ayudar a las personas enfermas, física y mentalmente".
Indicó que por medio de esta botella, "las personas que lo beban, además de estar en contacto con esta imagen, tendrán paz, alegría, fe y esperanza de que todo saldrá bien". En su oportunidad, Alejandra del Río, presidenta del proyecto Catarte, expresó que el mezcal es una bebida que considera "espirituosa y de los dioses".
De acuerdo con los organizadores, Meshico viene acompañado de botellas de colección, con una edición limitada de 400 piezas, siendo además, el primer mezcal negro del mundo, con ensamble de alcohol de 47 grados y con un terminado en tornasol.