Si camina con atención por la calle Julio Verne encontrará en el número 39 un pequeño paisaje árido, con algunas cactáceas y una planta de vino. Este pequeño tributo a Parras de la Fuente, Coahuila, anuncia que ha llegado a la tienda de vinos de la bodega Rivero González.
Su interior está elaborado con madera de encino y roble; algunos pedazos provienen de barricas de vino. Además, cuenta con un pequeño salón ambientado para catas.
En Parras de la Fuente, Casa Madero cultivó la primera parra de vid de América en 1597, por lo que nadie cuestiona la calidad de la tierra y de las vides de esta zona.
Por esta razón, un empresario de Monterrey decidió plantar en dos hectáreas sus primeras vides en 1998 y crear Rivero González. Seis años después empezó a comercializar con éxito sus etiquetas.
Actualmente cuenta con dos líneas: Rivero González y Scielo. La primera es su marca emblema, está integrada por un tinto, rosado y blanco. La producción es limitada, no supera las 15 mil botellas, y el precio es de 450 pesos, nada mal para un vino premium.
El blanco tiene una característica muy especial: está elaborado de uva Cabernet Sauvignon. Durante su producción se elimina todo el hollejo, lo que hace que el producto final no esté pigmentado.
El Rivero González tinto es la estrella del lugar. Elaborado con una mezcla bordelesa de uvas –Merlot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc-, este vino tiene un reposo de 24 meses en barrica, por lo que adquiere un tono ocre y un sabor intenso y persistente a frutos rojos.
La otra línea es la más accesible, pero mantiene los mismos estándares de calidad. Scielo, etiqueta que rinde tributo a los cielos parreños, está integrado principalmente por cuatro vinos monovarietales, tres tintos y un blanco, que abarca desde un fresco Chardonnay hasta un complejo Shiraz.
Un lugar dedicado al paisaje de Parras no estaría completo sin los nogales y sus frutos. Rivero González vende nueces gourmet provenientes de sus más de 200 hectáreas de nogales. Todas son seleccionadas y peladas a mano, y aseguran que conservan su frescura al secarse en sombra.
En la tienda venden bolsas con nueces enteras, confitadas o con cajeta para untar. Están por lanzar otras variedades con chocolate y chile.
Otros productos de Coahuila que se pueden encontrar en sus estantes son mermeladas, ate 100 por ciento de membrillo y orégano. La tienda de Rivero González es simplemente un pequeño tributo a la buena tierra parreña y sus frutos.