Prueba de Manejo Kawasaki Ninja 1000 SX

En el mundo de las Sport Turismo, esas motos cómodas pero potentes pensadas en viajes ágiles por carretera, hay un nombre que destaca en nuestra memoria por generaciones: Ninja.

La renovada 1000 SX es una moto potente a pesar de sus 236 kg. La agilidad se debe a un motor tetracilíndrico ligero y preciso, pero también a la puesta a punto del bastidor y suspensiones. Ahora incorpora luces LED de última generación, una pantalla de 4.3 pulgadas con conectividad inalámbrica por medio de la app rideology y un diseño extrovertido sin ser radical.

Una de las innovaciones más interesantes es el control de tracción ajustable en tres niveles, dependiendo el modo de conducción que seleccione el piloto, puede adaptarse tanto al camino como al ritmo de velocidad al que queramos circular. Los frenos ABS con sensores de inclinación y el quick shifter, nos ayudan a mejorar la conducción dinámica.

El acelerador electrónico nos permite sentirnos seguros en la entrada a curvas, siempre con control y progresividad, mientras los frenos están puestos a punto para controlar el peso casi en cualquier contexto. Los refuerzos en suspensión y el funcionamiento de los sensores nos dan la sensación de una moto más deportiva y potente, pero esta además es cómoda como pocas en el segmento.

El carenado tiene un aspecto deportivo y aerodinámico, pero la posición de manejo no deja de ser cómoda y más vertical que en una deportiva, lo que la hace mucho más cómoda para viajes por carretera. Sólo los retrovisores largos, como si fueran antenas, rompen un poco con el diseño.

Ficha Técnica