¿Buscas un moto rebelde? Esta, literalmente, es la más

Desde uno de los únicos tres Honda Powerhouse a nivel nacional, con el hermoso Golfo de California a nuestro lado, conocimos la versión más potente y tecnológica de la Honda Rebel.

Ya hace algunos años conocíamos a la Rebel 500, pero ahora con un motor más del doble de grande se antoja para una moto ideal para viajes largos por carretera. No sólo se trata de potencia, sino particularmente que se puede elegir con dos tipos de caja, una manual secuencial igual que su hermana menor, o una caja automática de doble embrague, la misma que monta la mismísima Africa Twin, aunque, de hecho, el motor también es el mismo.

La posición de manejo cambia muy poco respecto a la Rebel 1500, pero es un poco más cómoda y los pies van en posición más adelantada, esto debido a la necesidad de incorporar un motor mucho más grande y que, a su vez, puede incorporar dos tipos de cajas diferentes.

La contundencia del motor es espectacular. Si aceleramos a fondo de inicio, muy pronto estaremos circulando a altas velocidades, pero siempre con la tranquilidad de sentir una moto estable, rígida y potente, lo que nos transmite seguridad.

Una de las opciones más interesantes es la posibilidad de equipar una caja de doble embrague. Honda es una de las pocas marcas en el mundo que pueden ofrecer tecnologías como esta.

El resultado básicamente es una motocicleta automática que funciona igual que un Scooter. Con el puño derecho aceleramos y con el pie derecho y la maneta derecha frenamos. Aquí no hay embrague manual. La sensación es extraña al principio, sobre todo porque de repente, cuando aceleramos a fondo, se alcanzan a percibir los ligeros patinamientos de los embragues al soltar y colocar la siguiente marcha. Pero si decidimos hacer los cambios de forma manual con los botones en el puño izquierdo, la sensación se vuelve un poco más conocida y tradicional. De cualquier forma, excepcional, y para los más tradicionales, se puede elegir una caja tradicional secuencial.

La posición de manejo es muy cómoda, la posición del manillar es súper sencilla, y el grado de inclinación en curvas es muy permisivo, no para un manejo deportivo, pero si para un movimiento ágil en carretera. Al mismo tiempo, las suspensiones no son tan duras y los frenos responden bien a pesar de únicamente tener un disco adelante.

Con esta potencia, comodidad, electrónica y facilidad de manejo con la caja automática, la Honda Rebel 1100 se apunta muy fácil para hacer el candidato ideal para aquellos que quieren hacer largos viajes por carretera con la mayor comodidad posible y sin siquiera hacer cambios de velocidades.

Ficha técnica