Se trata de los modelos de acceso a la gama de sedanes en ambos casos; vehículos que apuntan más a la racionalidad sobre la pasión, o la utilidad sobre las prestaciones.
Primero tenemos un Toyota Yaris que llega estrenando generación, la cuarta para ser más precisos. La evolución se nota y luce muy bien. El frontal recuerda mucho a las proporciones del Avalon, que no se vende en México, pero que sí despliega una parrilla por demás prominente y faros angulados y alargados. VW Virtus, por otro lado, no tiene grandes diferenciadores con respecto a otros productos dentro de la marca. Esto puede ser positivo o negativo, dependiendo de nuestra interpretación: o puede faltarle un carácter propio, o es todo un acierto que parezca más a un Jetta, su hermano mayor.
POR DENTRO
El interior es donde la filosofía de las marcas queda en mayor evidencia. Por un lado, tenemos un Toyota que califica de sobrio o conservador. La temática es prácticamente monocromática, con el negro como dominante y encontramos buenos materiales y acabados.
De hecho hay plásticos y superficies ligeramente superiores en cuanto a tacto que lo que vemos en el Virtus; aunque no falta calidad en ninguno.
En Virtus la apuesta es más arriesgada, buscando una apariencia más moderna y que utiliza el juego con diferentes tactos y superficies para verse como un producto superior. Uno de los factores clave van a ser las pantallas, pues el alemán tiene un sistema de infoentretenimiento superior. No sólo por el tamaño y la resolución, sino porque tiene más capacidad de personalización y conectividad.
En ambos casos encontramos Android Auto y Carplay, sin embargo, en el japonés es por cable, mientras que en el VW es inalámbrico, y también sumamos un cargador por inducción, además de que la pantalla del Yaris deja mucho que desear. Por seguridad la partida se la lleva el Yaris.
En honor a la justicia debemos mencionar que encontramos seis bolsas de aire de serie en ambos, como también asistentes electrónicos básicos como control de estabilidad o de tracción. La diferencia radica en las asistencias avanzadas de conducción. Virtus solamente cuenta con frenado de emergencia frontal, mientras que Yaris a eso le incrementa alerta de tráfico cruzado trasero, alerta de cambio de carril (con asistente en la dirección), control crucero adaptativo y monitor de punto ciego.
AL VOLANTE
Dinámicamente nos encontramos con planteamientos diametralmente opuestos. Por un lado tenemos al Toyota, con un motor aspirado naturalmente de 1.5 litros que genera 105 hp. La transmisión es CVT y funciona correctamente para el concepto del auto.
No califica de veloz, pero para el día a día en ciudad y salidas esporádicas en carretera es más que suficiente. Se siente consistente en incorporaciones y ágil en las situaciones cotidianas.
Por otro lado, el VW Virtus en la variante tope de gama monta un moderno motor de tres cilindros turbocargado de 1.0 litros. Tiene apenas 9 hp más que el Toyota, pero la sobrealimentación le da otro carácter completamente diferente.
Es ágil y gana velocidad con facilidad. Eso sí, hay que esperar un par de segundos para que la turbina surta efecto, pues el retraso es bastante notorio. En compensación, notaremos que la presión que ejerce es considerable, incluso podemos llegar a notar torque steer en la dirección, por la capacidad de aceleración en algunas circunstancias. Si lo consideramos desde bajas revoluciones, incluso con la CVT la entrega de aceleración inicial en Yaris es más orgánica y directa.
Ambos son buenos productos con enfoques distintos, pero debemos apegarnos a la realidad, y es que la clave está en el precio. En ambos casos nos encontramos con las variantes tope de gama y la diferencia entre uno y otro es de 55,500 pesos. Esto tiene importancia cuando se trata de ganarle la mayor utilidad a cada peso en nuestro presupuesto y los factores decisivos serán, sí el dinero, pero también de enfoque y a qué atributos les damos más peso. En un segmento donde el precio es decisivo, la compra más inteligente es Yaris, pero en términos de plataforma y conducción dinámica, Virtus es referente.
INTIMIDADES
Toyota Yaris Sedán - Los espacios de carga en el interior podrían ser más generosos en tamaño. - El cuadro de instrumentos es digital, pero no se acerca a la calidad del VW. Hacen falta más puertos de carga USB. - La carga tecnológica de seguridad es uno de sus fuertes, considerando que es 55,000 más barato que el Virtus. Volkswagen Virtus- Los frenos traseros son de tambor, los de Yaris son discos sólidos.- El espacio de carga es mayor a la de un VW Jetta. Bien.- La cajuela debe abrirse por completo, de lo contrario, tiende a cerrarse mientras estamos inclinados cargando cosas.
FICHAS TÉCNICAS
TOYOTA YARIS SEDÁN
MotorL4, 1.5 l, 105hp
Transmisión
Automática continuamente variable (CVT), tracción delantera
Desempeño
Vel. Máx. N.D.0-100 km/h: N.D.
Rendimiento
19 km/l, tanque: 40 l, autonomía 760 km
Neumáticos
195/60 R16
Seguridad
Seis bolsas de aire, ABS, ESP, ASR, RCTA, DRCC,BSA, LKA, LTA y LDS
Gama de precios
De 299,900 a 375,900 MXN
Unidad probada
S CVT Hi: 375,900 MXN
VOLKSWAGEN VIRTUS
MotorL3, 1.0 l, turbo, 114 hp
Transmisión
Automática de 6 velocidades, tracción delantera
Desempeño
Vel. Máx. N.D.0-100 km/h: N.D.
Rendimiento
17.5 km/l, tanque: 50 l, autonomía 875 km
Neumáticos
205/50 R17 89H
Seguridad
Seis bolsas de aire, ABS, ESC, EB, HHC, EDS, MSR y ASR
Gama de precios
De 334,490 a 431,490 MXN
Unidad probada
Highline: 431,490 MXN