Los autos eléctricos son tan comunes en México, que ya no solo los ves recargar batería cuando viajas por la Ciudad de México o en ciertas carreteras sino que ya hay taxis de aplicación que funcionan con motor eléctrico. Pero detrás de esos autos que te prometen que no volverás a gastar en gasolina y que cuidarás el medio ambiente hay una pelea por liderar el mercado. Los combatientes principales son Tesla, empresa de Elon Musk que recientemente fue superada por BYD, empresa china que entró de lleno al negocio hace poco más de dos años.
En el cuarto trimestre del año pasado, BYD o Build Your Dreams, vendió más autos que Tesla, que lleva años siendo líder en la industria, con 526 mil 409 unidades de la compañía china sobre las 483 mil 173 entregas que hizo la reconocida marca de Elon Musk.
Para el primer trimestre de este año ambas empresas bajaron el ritmo; sin embargo, la pelea continúa fuerte por el ‘trono’ de los eléctricos. Pero esta contienda no es solo entre Tesla y BYD, sino que los gobiernos de Estados Unidos y China también contribuyen para ayudar a sus respectivas industrias.
BYD, por ejemplo, recibió cerca de 3 mil 700 millones de dólares del gobierno chino recientemente con el objetivo de que continúe con el liderazgo a nivel mundial. Mientras, Estados Unidos, que viene de una crisis debido a las huelgas en el sector automotriz del año pasado, planea implementar una serie de medidas para evitar la llegada de BYD y otros autos chinos a su mercado.
Los factores por los que BYD ‘le está comiendo el mandado’ a otras compañías de autos son varios, y con su posible llegada a México y expansión por Europa pone en alerta a los gigantes que dominaban el mercado, mientras el mundo hace la transición hacia los autos eléctricos.
¿Por qué BYD se convirtió en una de las marcas de autos eléctricos líder a nivel mundial?
BYD, o Build Your Dreams, comenzó fabricando baterías para autos, y luego de años de perfeccionar un sistema con el que se garantizara una buena autonomía, del que hablaremos adelante, logró incursionar en el mercado chino y posteriormente en el mundial con éxito.
Hasta 2021, BYD no estaba considerada entre las 10 mayores exportadoras de autos mientras el mercado local era liderado por General Motors y Volkswagen. Ese lugar era para el gigante chino llamado Geely, que incluso compró a la marca Volvo.
¿Qué pasó? Aquí hay cuatro motivos de su ascenso y de por qué ahora es el ejemplo a seguir en las ventas de autos eléctricos.
Apoyos del gobierno chino
Como mencionamos anteriormente, China tenía como líderes en ventas de autos a empresas como GM y Volkswagen; sin embargo, todo cambió con la transición a autos eléctricos, lo que dio oportunidad a las empresas chinas de captar a los compradores y apoderarse de su propio mercado, uno de los más grandes del mundo.
Al ver la oportunidad, el gobierno chino comenzó a dar apoyos económicos a empresas automotrices que pudieran innovar y ofrecer autos eléctricos, y ahí fue donde entró BYD, con su propia tecnología y promesa de dar coches híbridos que tuvieran 100 kilómetros de autonomía eléctrica antes de pasar al consumo de gasolina, aliviando las incertidumbres que tenían los chinos que apenas le iban ‘entrando’ a la transición para consumir menos gasolina.
Los apoyos del gobierno de China a BYD aumentaron a medida que la marca iba dando resultados, pasando de 220 millones de euros en 2020 a 2 mil 100 millones de euros en 2022. Se estima que para el año pasado hubo un apoyo de 3 mil 400 millones de euros, con el objetivo de que continúe su dominio.
Mientras BYD comenzó a repuntar en la venta y fabricación de autos eléctricos, Geely, la marca principal durante años en China, fracasó en sus intentos porque 90 por ciento de sus ventas fueran de autos eléctricos y apenas consiguió el 5.2 por ciento.
Esto dio más presencia a BYD, además que le permitió llegar a otros países y ser parte de la ‘invasión china’ con la que llegaron varias marcas a otros países del mundo, incluido México, logrando inundar los mercados y poner a temblar a los rivales europeos y estadounidenses.
Guerra de precios
Otro de los temas centrales en el ascenso de BYD son sus precios, ya que hasta la fecha continúa como una de las principales opciones si una persona quiere acceder a un coche eléctrico por menos de 400 mil pesos mexicanos, esto gracias a su modelo Dolphin Mini, que vale 358 mil pesos en su versión más económica, mientras que un Tesla puede alcanzar los 890 mil pesos, más del doble.
Si bien en México hay autos eléctricos más baratos como el E10 X de JAC o un E-Wan Cross Lite de SEV, BYD tiene el potencial de llegar a más sitios en el mundo, lo que le ha consolidado como una de las principales opciones de autos eléctricos económicos.
Incluso se ha reportado que en otros países de Asia se pueden comprar autos BYD por cerca de 10 mil dólares.
Mercado de autos eléctricos
Este es un punto clave, ya que algo que reconocen competidores a BYD, como Geely, es que la marca china está haciendo bien las cosas y que “deberíamos aprender de ellos”. pues mientras otros países continúan con un paso lento en la transición a autos eléctricos en sus principales marcas, la empresa china se ha apoderado de sus mercados con la llegada de sus vehículos.
En México no fue muy exitoso al principio, pues la aparición de estos autos en tiendas Liverpool no logró las ventas deseadas; sin embargo, sirvió para comenzar a posicionarse, y ahora se coquetea con la creación de una fábrica en México, lo que amenaza fuertemente a Estados Unidos, que busca hacer lo posible para que sus autos no entren al país.
Otro ejemplo es Tailandia, uno de los sitios en los que la industria automotriz es fundamental y donde Japón tiene mucha presencia, pero que con los bajos costos que ofrece BYD buscará ganarle la carrera.
Latinoamérica es una región en particular atractiva para BYD, pues datos de Bloomberg indican que hay países como México, Brasil, Chile y Argentina en los que los autos eléctricos apenas significan el 5 por ciento de las ventas de carros nuevos.
En cuanto a los países de sus principales competidores, es decir, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, la transición hacia los eléctricos ha sido lenta, esto principalmente por los altos precios. Y a comparación de ellos, en China la búsqueda por que la mayoría de autos en las calles sean eléctricos ha favorecido fuertemente a BYD.
El gobierno chino, además de impulsar económicamente a BYD y otras empresas, también las ha instado a comprar semiconductores de su país, así como componentes para la fabricación de autos, con lo que se han beneficiado otros actores de la industria.
Además, el hecho de que BYD esté apoderado del mercado chino es una buena ventaja. Hablamos de un país donde se planea promocionar la Cybertruck de Tesla en tiendas, algo que no ocurre en otros lugares del mundo, y esto en buena parte por el nivel de consumo que solo se tiene ahí.
La pelea en China es muy interesante, pues se llegó a un punto en el que si vas a una concesionaria a compra un auto eléctrico, los vendedores te lo ofrecen con refrigerador integrado, o si así lo prefieres kits para dormir, sistemas que vibran al ritmo de tu corazón para que no te alteres con los ‘frenones’, cocinas para la parte trasera, videojuegos para los acompañantes, drones que controlas desde la pantalla de tu auto para que te grabes mientras andas en la calle, y hasta en un futuro se esperan sistemas de pesca (sí, de pesca de peces) y un sistema de recaudación de agua de lluvia y del propio carro que luego se podrá regar en las plantas.
Tecnología y rendimiento
Finalmente, y quizás el punto más importante en el ‘boom’ de BYD, es la tecnología de sus baterías y el rendimiento que ofrecen por su precio, pues luego de 20 años de perfeccionar su sistema DM-i, que permite que los autos funcionen con su sistema eléctrico hasta que se agote para luego pasar al consumo de gasolina, se ganó un lugar en el mercado.
Esta apuesta fue fundamental, pues a diferencia del sistema DM-i de BYD, otras empresas comenzaron en los autos eléctricos con una arquitectura llamada P2, o posición 2, que agrega un motor eléctrico para convertir una transmisión de combustión convencional en un híbrido enchufable sin cambiar el motor o la transmisión, pero que solo da un alcance de 51 kilómetros, mientras que los de BYD alcanzaban los 100 kilómetros antes de comenzar a consumir gasolina.
Además de la ventaja que significaban las baterías, BYD dio a los consumidores la certeza de cuánto tenían que recorrer para seguir aprovechando las ventajas del sistema eléctrico en su día a día y así gestionar de mejor forma a los autos, así como el dinero para el combustible.
Eso era en un principio, y con los avances de los últimos años, actualmente la empresa ofrece autos que dan más de 600 kilómetros de autonomía por carga, como su modelo Han que está a la venta en México.
Con información de Bloomberg.