Las economías del Bajío han iniciado el presente año con mejoras en el empleo como resultado de la fuerza productiva del sector industrial y de la ola de inversiones en el sector automotriz, las cuales tienen una importante capacidad de generación de nuevas fuentes de trabajo para la región.
En Guanajuato, la tasa de desocupación se colocó de un nivel de 5.2 a 4.9 por ciento de la población económicamente activa (PEA) entre marzo del 2014 e igual mes del 2015, esto implicó un descenso de 0.3 puntos porcentuales.
Querétaro también logró reducir su tasa al pasar de 4.9 por ciento en marzo del 2014 a 4 en igual periodo del 2015, en este caso la disminución anual fue de 0.9 puntos porcentuales, mientras que en San Luis Potosí se mantuvo estable al permanecer en una tasa de 2.8 por ciento, esto según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Si bien hubo una baja generalizada en la tasa de desempleo de las entidades del Bajío durante marzo, se observó que sólo la entidad potosina registró un nivel menor al promedio nacional, el cual fue de 3.9 por ciento en marzo del presente año.
Entre las entidades que mostraron un nivel inferior al promedio nacional se encontraron: Campeche con 2.8 por ciento, Chiapas con 2.7, Chihuahua con 3.5, Guerrero con 1.8, Hidalgo con 3.8 y Michoacán con 2.9.
En contraste, los estados con las tasas más elevadas de desocupación fueron: Tabasco con 6.6 por ciento, Durango con 5.9, Distrito Federal con 5.8, Baja California Sur con 5.7, Coahuila con 5.5, así como Estado de México, Sonora y Tamaulipas con una tasa cada uno de 5.1.
En el país el desempleo sigue afectando principalmente a los que tienen mayores niveles de estudio, que representan el 79.1 por ciento de los desocupados, mientras que un 20.9 son los que no cuentan con estudios completos de secundaria.
Este fenómeno obedece a varios factores, entre ellos a una abundante oferta de trabajo de profesionistas con estudios que no son adecuados a los requerimientos actuales del mercado, pero también a las deficientes políticas públicas y empresariales para construir un mercado de trabajo acorde con las condiciones de la economía mexicana.
No obstante, en el Bajío se observan descensos importantes en el desempleo en los últimos tres años, por ejemplo en Guanajuato la tasa de desempleo llegó a estar cerca del 7 por ciento a principios del año 2012, mientras que en Querétaro estuvo en más de 5 por ciento, por su parte San Luis Potosí ha mostrado una tasa de ocupación más estable pues a principios del 2012 estuvo en 2.95 por ciento.
EXPECTATIVAS DE LA DESOCUPACIÓN
Los analistas económicos entrevistados por el Banco de México en marzo pasado indican que la tasa de desocupación promedio podría cerrar el año 2015 en 4.49 por ciento y la expectativa para el siguiente año es que siga en descenso pues se prevé en promedio una tasa de 4.33.
Por otro lado, la expectativa que se tiene en relación con el aumento del empleo formal en el país o trabajadores asegurados en el IMSS, indica que en promedio se calcula un aumento de 684 mil trabajadores para 2015 y se prevé un incremento de 736 mil ocupaciones para 2016.
Para el presente año, los empresarios se mantienen con un optimismo en las contrataciones en el sector automotriz y sectores afines, así como en la construcción, en el comercio y en algunos servicios.
