Cuando Kevin Systrom y Mike Krieger crearon la aplicación que se convertiría en Instagram, aprovecharon la ola de un gran cambio tecnológico al crear una sencilla utilidad. El iPhone había llevado al rápido auge de la fotografía de teléfonos inteligentes, por lo que el dúo creó una aplicación que ofrecía filtros de software gratuitos para mejorar la apariencia de las instantáneas. Las características de las redes sociales que convertirían a Instagram en uno de los productos de consumo más exitosos de todos los tiempos llegaron más tarde. “Instagram para muchas personas fue primero una aplicación de filtro y luego una red social”, dice Systrom. “Para mí está bastante claro que las mejores redes sociales generalmente comienzan como una utilidad que hace otra cosa y se convierten en una red social con el tiempo”.
Los fundadores superaron la salida de algunas aplicaciones de fotografía similares y se hicieron prominentes dentro de los círculos tecnológicos, sin mencionar la riqueza, al vender Instagram a Facebook en 2012. Casi cuatro años después de retirarse tras los desacuerdos con el director ejecutivo de Meta Platforms Inc., Mark Zuckerberg, sobre la dirección de Instagram, Systrom, ahora de 39 años, y Krieger, de 37, volvieron a unirse para crear algo nuevo: una aplicación de lectura de noticias llamada Artifact .
La esperanza a largo plazo es replicar el éxito de Instagram como red social, pero Artifact también se basa en la idea de que sentar las bases significa construir primero una herramienta simple y útil. La aplicación se centra en una fuente desplazable de artículos de noticias, personalizada al gusto de cada lector. Los usuarios deben ingresar al menos 10 categorías de noticias y las publicaciones que les interesen. Luego, los algoritmos rastrean el comportamiento de los usuarios y determinan qué artículos mostrarles. La aplicación pide a los lectores que hagan clic en al menos 25 artículos durante dos semanas para que pueda personalizar sus ofertas, mostrando su progreso en la esquina inferior derecha de la página. Eventualmente, Artifact incorporará características sociales para que las personas puedan discutir lo que están leyendo con otros.
Este tipo de aplicación no es una idea particularmente novedosa. Un competidor obvio y desalentador es Apple News, que tiene la clara ventaja de venir instalado en todos los iPhone. Construir una gran red social también es difícil, en gran parte debido al dominio de Meta y otros titulares. Pero hay una sensación de oportunidad en el aire. Facebook de Meta ha estado tropezando y se está retirando de las noticias en su aplicación, terminando acuerdos con editores y empujando a más personas a usar videos cortos para competir con TikTok.
Mientras tanto, Twitter, que tiene la reputación de ser la red social preferida por los adictos a las noticias, ha estado en caída desde que Elon Musk la compró en octubre, lo que dio lugar a algunas imitaciones con la esperanza de atraer a los usuarios desencantados que buscaban una alternativa. Este puede ser el mejor momento en la memoria reciente para iniciar una red social, especialmente una centrada en las noticias.
Systrom dice que está menos concentrado en el drama de Twitter Inc. que en otra historia que cautiva a Silicon Valley: el surgimiento de nuevas herramientas de inteligencia artificial. Los avances recientes en el software de inteligencia artificial han mejorado drásticamente la forma en que las computadoras pueden comprender y producir texto, lo que podría resultar útil para una aplicación como Artifact.
Aunque la IA ha sido un elemento básico de la industria de la tecnología durante años, la cosecha actual de las llamadas herramientas de IA generativa, que crean sus propios escritos, fotos o videos, ha convencido a muchas personas de que se está produciendo una transformación. Systrom dice que las mejoras avanzadas en el modelado del lenguaje podrían producir una gran cantidad de nuevas empresas, al igual que el iPhone marcó el comienzo de la economía de aplicaciones móviles más amplia. “Las puertas generalmente se abren cuando ocurren cambios tecnológicos fundamentales”, dice.
Al principio, Systrom ve a Artifact usando dicha tecnología para filtrar un mar de titulares y decidir qué historias querrá leer cada persona. En el futuro, dice, su empresa podría crear su propio contenido, tal vez utilizando un software de generación de texto para resumir o analizar los principales eventos noticiosos.
Desarrollar la tecnología es solo el primer paso. Artifact tendrá que idear un modelo de negocio sostenible y, muy probablemente, un argumento convincente para los socios de medios si la aplicación continúa expandiéndose. Systrom y Krieger tienen algunas ventajas naturales, incluida su riqueza personal (por ahora, están financiando Artifact por su cuenta) y el reconocimiento de su nombre, lo que atraerá la atención de muchas personas dentro y alrededor de la industria tecnológica. Aunque dice que el momento no podría ser mejor, Systrom reconoce que las posibilidades de una nueva empresa en las redes sociales nunca son buenas. “Es realmente difícil construir una de estas cosas desde cero”, dice.
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