El líder de la oposición venezolana, Edmundo González, informó que planea asistir a la ceremonia de asunción al cargo de Donald Trump, el próximo lunes 20 de enero.
La invitación se produce luego de que Donald Trump reconociera a González como el “presidente electo” de Venezuela durante la investidura de Nicolás Maduro la semana pasada, de acuerdo con informes de su jefe de prensa.
Maduro ha recrudecido la represión contra sus opositores e incluso cerró las rutas aéreas y los cruces terrestres con Colombia para impedir que su oponente electoral, que huyó del país, regresara e interrumpiera su asunción.
Tras proclamarse vencedor en las elecciones presidenciales de julio en Venezuela a pesar de las pruebas que indicaban lo contrario, Maduro juró su cargo para un tercer mandato de seis años, el pasado 10 de enero.
Estados Unidos respondió aumentando las recompensas por su captura y la de sus principales aliados, así como imponiendo nuevas sanciones individuales a algunos de sus funcionarios.
El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió una alerta para detener a Nicolás Maduro y ofreció 25 millones de dólares por información que lleve a su arresto.
Adicional a ello, publicaron un comunicado firmado por Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, donde afirma que Maduro perdió las elecciones en su país.
‘’El presidente electo Edmundo González Urrutia debe juramentar y debe comenzar la transición democrática. Estamos dispuestos a apoyar el retorno a la democracia en Venezuela’‘, se detalla.
El Departamento de Estado también está tomando medidas para imponer nuevas restricciones de visas a personas afines a Maduro por su papel en socavar el proceso electoral o en actos de represión en Venezuela. Hasta la fecha, se han tomado medidas para imponer restricciones de visas a casi 2 mil personas
Se espera que Donald Trump adopte una línea más dura contra el régimen de Maduro que la del gobierno de Biden. El candidato de Trump para secretario de Estado, Marco Rubio, sostuvo que EE.UU. debería reconsiderar las exenciones que permiten a las empresas estadounidenses y extranjeras realizar negocios petroleros en Venezuela.