LAREDO, Texas.- Desde hace meses, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha recorrido el país para hacer sonar las alarmas a la ciudadanía sobre el cambio climático que se vive, las consecuencias que genera y las que podría traer en un futuro si esto no se revierte; tal como se aprecia en los incendios forestales de California o los destrozos provocados por huracanes en Nueva York y Luisiana.
Para apoyar esta medida, los demócratas apuestan cada vez más a tomar acciones para proteger el medio ambiente desde la Cámara de Representantes. Ya se habla sobre utilizar el dinero para un gigantesco proyecto presupuestario destinado a combatir el cambio climático.
Sin embargo, este no es un tema sencillo, ya que mientras se busca beneficiar al planeta, miles de hispanos que trabajan en el sector energético -principalmente al sur de Texas- se podrían ver afectados por las políticas que entren, ya que los obligaría a elegir entre llevar sustento a sus hogares o contribuir al cuidado del medio ambiente.
Actualmente, el proyecto de gastos que se debate en el Congreso incluye propuestas pensadas en intensificar la lucha contra el cambio climático, tal y como Joe Biden lo ha solicitado. Se habla de penalidades para quienes generen contaminación e incentivos impositivos para la producción de energía limpia y vehículos eléctricos, así como la generación de energía de fuentes renovables.
Una encuesta de la Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research de septiembre reveló que el 58 por ciento de los hispanos aprueban el manejo que hace Biden del cambio climático y un 38 por ciento no está de acuerdo. Estos datos, sin duda alguna, podrían cambiar a favor o en contra de las medidas que se adoptan en este tema mientras más crezca y afecte a la población en algo tan importante como su sustento económico.
El estado de Texas es el pulmón energético de Estados Unidos, por lejos el mayor productor de petróleo crudo y gas natural del país; pero al mismo tiempo es uno de los estados que genera más polutantes ambientales.
Para Gabriel Sánchez, director ejecutivo del Centro de Políticas Sociales de la Universidad de Nuevo México, los hispanos siempre se muestran a favor de la protección del medio ambiente, siempre y cuando no afecte sus empleos.
“Los hispanos están muy conscientes del cambio climático y apoyan todas las iniciativas para combatirlo. Pero cuando existe la posibilidad de perder empleos, están mucho más divididos”, expresó Sánchez.
Los hispanos podrían dar un revés a estas nuevas medidas que se buscan dependiendo de los votos que den las próximas elecciones, pues este es un tema de interés demócrata principalmente y si no obtienen la mayoría en la Cámara de Representantes para 2022, sería más complicado seguir con estas nuevas políticas, a menos que se les ofrezca buenas oportunidades de empleo con la llegada de más parques eólicos a la región.
En Texas, el 39 por ciento de la población es hispana y en el condado de Dallas el porcentaje es de 42 por ciento. Además, en 72 condados de Texas, los hispanos son el grupo poblacional más importante.