Eagle Pass, Texas.- Reforzar la seguridad en la frontera entre México y Estados Unidos con miles de elementos extra no es suficiente para el gobernador Greg Abbott. El mandatario texano anunció que la Guardia Nacional de Texas construirá una barrera flotante de mil pies de largo (unos 300 metros) en el Río Bravo, es decir, usarán boyas de cuatro pies de altura para evitar que los migrantes crucen de manera ilegal.
La idea es convencer a los migrantes de utilizar las vías legales como los puertos de entrada para acceder al país. Por ello, las tropas iniciarán la instalación de boyas a finales de este mes en Eagle Pass, donde hay aguas poco profundas, que son utilizadas para adentrarse a Texas.
La obra costará casi un millón de dólares al estado, y es parte de la controversial Operación Lone Star, que ha sido utilizada por Gregg Abbott para tratar de contener la inmigración ilegal hacia Texas.
Esta barrera flotante se suma al alambre de púas y contenedores de carga que han extendido a lo largo de la frontera.
“Cuando tratamos con 100 o mil personas, uno de los objetivos es reducir la velocidad y disuadir a la mayor cantidad posible. Algunos de ellos, eventualmente pueden llegar a la frontera donde se enfrentarán a ese alambre de púas de múltiples capas y a toda la fuerza de la Guardia Nacional y los oficiales (de la policía estatal) que no les permitirán pasar”, señaló.
Steven McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, explicó que debajo de las boyas habrá una red para que las personas no puedan sumergirse y cruzar. Además, precisó que se pueden mover rápidamente, de ser necesario y han sido probadas por otras agencias como la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
“No queremos que la gente cruce y siga poniéndose en riesgo”, dijo.
El anuncio de la nueva barrera fue realizado por el gobernador Gregg Abbott durante una ceremonia en la que firmó seis proyectos de ley de la Legislatura de Texas relacionados con la seguridad fronteriza, de los cuales dos involucran directamente a la Guardia Nacional del estado.
Por ejemplo, una nueva ley otorga a las fuerzas militares de Texas la autoridad para usar drones como parte de una misión. Otra autoriza al gobernador coordinar y ejecutar un acuerdo interestatal para la seguridad fronteriza entre los estados interesados sin la aprobación del Congreso.