Laredo, Texas- La tormenta invernal de 2021 dejó claro a Texas que su red eléctrica tenía que mejorar, es así que desde entonces, el Consejo de Confiabilidad Eléctrica -ERCOT- ha realizado algunos cambios y propuesto soluciones para evitar un desastre, sin embargo, no todo está solucionado y a medida que llegan los frentes fríos de la temporada, el sistema se encuentra en riesgo.
A principios de octubre, funcionarios de ERCOT, anunciaron que querían más energía y plantas disponibles para funcionar este invierno. Explicaron que la demanda de electricidad había aumentado en general, y las tormentas invernales extremas pasadas mostraron cómo la demanda podría incrementar durante temperaturas gélidas.
El plan que tenía la dependencia era complejo, por un lado, hacer que empresas pusieran en funcionamiento algunas centrales eléctricas de gas y carbón cerradas, y pasar factura a ERCOT; y por otro, ofrecer pagos a las compañías que estuvieran dispuestas a reducir su uso energético durante hasta seis horas cuando fuera necesario.
Los resultados no fueron los esperados, pues para la primera parte de dicho plan, no hubo ni una sola propuesta, y para la segunda fueron solo tres empresas las interesadas, por lo que el Consejo descartó toda la idea.
El episodio se convirtió en otro ejemplo de lo complicados que se han vuelto los problemas de la red eléctrica después de la tormenta invernal de 2021. Ese desastre mató a cientos de personas cuando tanto las plantas de energía convencionales como los generadores de energía renovable fallaron durante días de temperaturas gélidas, lo que provocó que ERCOT ordenara que se cortara la electricidad a millones de texanos para proteger la red del colapso total.
Otra de las fallas de la red se debió al suministro de gas natural. En una declaración de noviembre, la Asociación de Petróleo y Gas de Texas dijo que los operadores de petróleo y gas ahora “cuentan con amplios recursos para monitorear y prepararse para las inclemencias del tiempo”.
Sin embargo, en octubre, los líderes de ERCOT todavía estaban preocupados por la capacidad de la red para resistir climas invernales extremos. El Consejo señaló que la red enfrenta una probabilidad “inaceptable” del 20 por ciento de entrar en operaciones de emergencia ante una fuerte tormenta invernal.
Algunos expertos de la industria energética se sorprendieron ante esa caracterización, señalando que las posibilidades de que una tormenta así vuelva a ocurrir siguen siendo pequeñas; el propio ERCOT sitúa la probabilidad en un 10 por ciento.
De esta manera, las probabilidades de que la red aún falle siguen presentes a casi tres años de la mencionada tormenta invernal, por lo que habrá que esperar más medidas por parte de ERCOT y ver cómo serán las condiciones climáticas esta temporada.