Una veintena de comerciantes que cuenta con establecimientos en Moneda, donde se ubica Palacio Nacional, tomaron la calle en demanda de que sea reabierta, pues ha estado cerrada durante toda la semana, y de forma constante, desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador despacha en el recinto histórico.
“El Presidente atiende a los legisladores (funcionarios) de otros países por la calle Corregidora, sus camionetotas ahí las traen, pero aquí calle Moneda por qué las cierra, queremos saber cuál es su inquietud, por qué cierra, antes con las manifestaciones que había no cerraban esta calle, las manifestaciones estaban enfrente de Palacio”.
“De que se vino a vivir el señor para acá, supuestamente, cierran, y Corregidora abierta”, expresó Jorge Fernández Herrera uno de los comerciantes en referencia a la calle paralela al Palacio, y por la cual ingresa, ocasionalmente, el Ejecutivo federal, funcionarios e invitados.
Los comerciantes acusaron pérdidas del 100 por ciento, pues al no haber paso peatonal no sacan para pagar las rentas de sus negocios.
Hasta las 11:00 horas de hoy, la Policía del Gobierno de la Ciudad de México, encabezada por Claudia Sheinbaum, mantenía el control de acceso a la calle envallada, en los límites con Seminario y Correo Mayor, sólo para trabajadores de Palacio Nacional, pero fue burlada por los comerciantes quienes agregaron cuerdas y su valla humana para impedir el paso al 100 por ciento.
Los manifestaron acusaron “atole con el dedo”, pues funcionarios de la alcaldía Cuauhtémoc, la Jefatura de Gobierno y la propia Presidencia no les dan solución.
El lunes, la Policía de Sheinbaum también fue burlada y otros manifestantes lograron colocar unas casas de campaña frente a la Puerta 1 de Palacio.
Desde que inició la pandemia, y con el pretexto de la Jornada Nacional de Sana Distancia, dos de las calles de acceso a Palacio Nacional están cerradas de forma parcial con vallas.
Corregidora es un estacionamiento para invitados del Presidente y funcionarios, y sólo mantiene un pasillo abierto de forma intermitente para el paso peatonal.
En Moneda, también envallada, la Policía mantiene el control del paso la mayor parte del día.