En el número 300 de avenida Insurgentes Sur se levanta uno de los edificios más emblemáticos de la Ciudad de México.
El edificio Canadá o Insurgentes 300 es una de las ruinas que dejó el exuberante periodo del milagro mexicano en la capital del país.
Desde su construcción en 1958, ha resistido los temblores de 1985 y 2017, ha sido el escenario de un asesinato y recientemente víctima de un incendio.
Esta gigantesca obra fue apodada con el nombre de “Canadá” gracias a la estridente publicidad del slogan de una zapatería que iluminaba uno de sus costados.
La enorme masa de 56 metros de altura contiene 420 despachos y oficinas que pertenecen a la misma cantidad de dueños, situación que da cuenta de los problemas para poder llegar a acuerdos en el mantenimiento de la estructura dañada por el tiempo y por la fuerza de dos sismos devastadores.
Lo que actualmente asemeja a un lúgubre edificio perfecto para un largometraje de terror, en su momento fue uno de los inmuebles exclusivos de la capital. Sus departamentos distribuidos en 16 pisos, sobre una plaza comercial y debajo de un helipuerto, eran ofertados como “de lujo”.
Edificio Canadá resiste a todo
La mañana del 19 de septiembre de 1985, la capital del país amaneció devastada. Un terremoto había cimbrado el suelo dejando construcciones desmoronadas y miles de pérdidas humanas.
La colonia Roma, donde se ubica el edificio Canadá fue una de las más afectadas, sin embargo, todo parecía indicar que su estructura permanecía ilesa.
De acuerdo con informes recuperados por El Universal, tras una serie de revisiones periciales se determinó que desafortunadamente contaba con daños no solo en la estructura sino en la cimentación, y se instó al dueño (en realidad a los 420 propietarios) a realizar los trabajos de reparación correspondientes.
Diez años después y a pesar de los reportes, el edificio seguía en pie. En ese momento ocupó los titulares pero no por el peligro que representaba sino porque en uno de sus despachos del noveno piso, el exprocurador de Justicia y Magistrado del Distrito Federal, Abraham Polo Uscanga, fue hallado muerto.
Diecisiete años después de cumplido el nuevo siglo, las alarmas sísmicas alertaron de otro temblor. A unos metros del Canadá, en la calle Medellín y San Luis Potosí un edificio se desplomó dejando a varias personas atrapadas en su interior. ¿E Insurgentes 300? Fue el que mejor se conservó según reportó el diario El País.
Sin embargo, sus habitantes y los de construcciones contiguas fueron desalojados por riesgo de derrumbe.
Días después de los sismos del 19 y 22 de septiembre de este año, su historia ha sido recordada a propósito de un incendio reportado la noche de este lunes que dejó calcinados dos de sus departamentos.
Los equipos de emergencia se movilizaron a tiempo y se logró la evacuación de 150 personas. Afortunadamente no hubo lesionados.