CDMX

José Villela fue aplastado por un camión de basura que cayó del Periférico y ahora es atleta

Luego de que un camión de basura le cayó desde el segundo piso del Periférico de CDMX, José Villela pasó meses hospitalizado y comenzó una nueva vida cerca de la psiquiatría y el deporte.

José Villela fue víctima de la caída de un camión de basura desde el segundo piso del Periférico. (Instagram: @josevillelav, shutterstock, cuartoscuro)

La Ciudad de México ha sido sede de accidentes viales que han marcado a la ciudadanía. Se puede recordar el desplome de la Línea 12 del Metro, así como la caída de un helicóptero. Un caso similar ocurrió el 19 de enero de 2010, cuando un camión de basura cayó del segundo piso del Periférico, lo que cambió la vida de José Villela, quien quedó cuadrapléjico a causa del hecho.

Aquel 19 de enero, cerca de las 16:00 horas, el camión recolector de basura que circulaba en el segundo piso del Periférico cayó desde una altura de 10 metros. Los reportes de ese día indican que le ganó el peso y el chófer, quien murió minutos después del accidente, perdió el control del vehículo.

Cerca de una decena de autos que estaban al nivel de calle fueron afectados por la caída de basura. Además, el cierre vial en el Periférico a la altura de Rómulo O’Farril, en la alcaldía Álvaro Obregón, se postergó dos horas.

El camión de basura cayó sobre dos autos Jetta. En uno iba Dafne Pedroza, quien resultó con heridas. El otro vehículo era manejado por José Villela, quien se llevó la mayor parte del impacto .


Este impacto acercó a Villela a la muerte, aunque también le dio la oportunidad de convertirse en atleta y ahora ser reconocido como un referente de superación personal, con cientos de conferencias narrando su vivencia.

¿Quién es José Villela?

Es un médico especializado en psiquiatría. El día del accidente, José salía de una guardia en el Hospital ABC, ya que era estudiante de Medicina.

José Villela tenía 23 años el día del accidente y estaba en el quinto año de su carrera, cerca de terminarla, ya en la etapa de internados. Se dirigía a su casa para dormir y olvidarse de todo luego de la jornada en el hospital.

“De repente escucho un ruido y siento un impacto muy fuerte, como si fuera una explosión. En ese instante yo no sabía que había pasado, simplemente me di cuenta que no podía moverme y es una realidad para la que no estás preparado”, mencionó Villela en entrevista para el podcast Cracks.


Las piernas dejaron de responderle, el tiempo pasaba lento y se sentía “indefenso” mientras escuchaba gritos. Un policía gritó “está vivo” para alejar a la gente y que no intervinieran en las labores de los equipo de rescate que lo trasladaron al Hospital ABC, de donde había salido, para ser internado.

El policía le ayudó a Villela para contactar a su padre, quien estaba en una comida de trabajo. En cuanto se enteró acudió al lugar del accidente y corrió entre los carros ante el tráfico para encontrar a su hijo dentro de la ambulancia.

Una vez que llegó al Hospital ABC, el hombre de 23 años fue recibido por sus familiares y amigos con los que trabajaba. Reconoció que la situación le puso vulnerable y le hizo pensar si iba a sobrevivir o no.

Si bien ver a su papá y sus hermanos le dio “pila” para afrontar la situación, el panorama no era positivo para José Villela, ya que los doctores le dijeron que necesitaban reconstruirle el cuello. Tenía “desconectada” su cabeza del cuerpo, como él mismo relata

¿Qué pasó con José Villela tras el accidente en Periférico?

A las 20:00 horas de ese mismo 19 de enero, el entonces joven de 23 años entró al quirófano para someterse a una “compleja” cirugía de 13 horas. Su estado era crítico, y los médicos optaron por dejarlo en coma para evitar riesgos.

“La mayoría no llegan al hospital, y los que llegan mueren en las primeras horas o los primeros días. Sí era un escenario crítico... Me cuestiono qué fue lo que me blindó en esa parte. Entendí que me tocaba ser paciente y escuchar. De alguna forma callar mi voz interna, que me iba a causar mucha angustia”, explicó.

Entubado, sin posibilidad de hablar ni de llorar, el hombre reconoció que su condición era crítica y estaba a la deriva. El tiempo le ayudó a reflexionar y darse cuenta que su vida no iba a volver a ser la misma.

Una vez que recobró el conocimiento, los doctores fueron honestos con él. Le dijeron que tenía fracturada la columna vertebral y su médula estaba seccionada.

El enfoque adoptado por los médicos que lo atendían fue ir poco a poco, con pequeños objetivos para recuperarse y dejar que su vida dependiera de respiradores.

Sin embargo, la condición a la que se enfrentaba le hizo pensar en repetidas ocasiones si valía la pena o no seguir con vida. Fueron las “pequeñas victorias” las que hicieron que se motivara a lo largo de los 11 meses que pasó hospitalizado y con terapias físicas para poder volver a la vida.

¿Cómo se acercó al deporte José Villela?

Años después del accidente, un domingo, José Villela comenzó con la curiosidad sobre si podía nadar en una alberca, y saber que era uno de los espacios donde no dependía de la silla de ruedas le generó ilusión por aprender y mejorar su técnica.

La situación le llevó a buscar entrenadores que le apoyaran. A través de la lista del Comité Paralímpico, José Villela se encontró con un entrenador, quien lo citó el siguiente martes, es decir, dos días después de que se probó en una alberca, para ver si podía ayudarle.

El entrenador lo puso a nadar por un carril, y Villela tuvo un camino complicado, ya que quedó bajo el agua un par de ocasiones, no movía bien la espalda ni los brazos y no tenía ritmo para remar con los brazos.

Aún así, el entrenador le dijo que era una persona “de interés” para el Comité Paralímpico. El motivo del interés era el grado de su incapacidad, que era “alto” comparado con el de otros atletas paralímpicos.

Con dicho nivel de incapacidad, José tenía oportunidad de competir en un rubro de la natación paralímpica en la que hay menos rivales, y por ende había más posibilidades de ganar medallas.

Los entrenamientos comenzaron. El objetivo era transformarse en un atleta de alto rendimiento en su rubro. Con los meses logró posicionarse en competiciones internacionales y llegar a los Juegos Parapanamericanos.

Sin embargo, su camino en la natación no duró mucho tiempo. Tras conocer el lanzamiento de clava eligió quedarse en ese deporte, debido a que la plataforma “era más pareja” que la natación. Además, la pandemia ayudó a José Villela a dedicarse más a su nueva disciplina, ya que las albercas cerraron mientras que los campos de entrenamiento permanecieron abiertos.

Actualmente, José Villela forma parte del equipo paralímpico de atletismo y está en el top 12 mundial. Si bien no calificó a los juegos de París 2024, dijo que tiene en la mira clasificar a Los Ángeles 2028.

¿Cómo es la vida de José Villela tras la caída de un camión encima de su auto?

A más de 14 años del accidente en Periférico, José Villela es conferencista. Continúa en el deporte y terminó la carrera de Medicina, con una especialidad en psiquiatría.

Vive con su esposa y busca ser padre. Se considera un hombre con la intención de ser un “buen padre” para sus futuros hijos, además de que asegura que volverá a las instalaciones médicas para continuar trabajando en un sector que le gusta.

El tema deportivo continúa, y sus aspiraciones son ejercitarse más y entrar a los paralímpicos de 2028.

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