Nikola Tesla inventó hace más de 100 años una válvula de agua unidireccional, la cual podría ser adaptada para bombear fluidos alrededor de motores utilizando energía que de otro modo se desperdiciaría.
Este invento fue planteado por Tesla en 1920 bajo el nombre de conducto valvular, el cual es esencialmente una tubería con un intrincado diseño interno que fuerza al fluido a que se mueva en una dirección para retroceder sobre sí mismo en varios puntos de su longitud.
Leif Ristoph, de la Universidad de Nueva York, junto con sus colegas decidieron construir su versión del invento siguiendo el plan original de Tesla.
Los resultados arrojaron que aunque Tesla afirmó en la patente que el agua fluía 200 veces más lento, los investigadores encontraron que en su versión solo lo hace dos veces más lento. “No está claro si realmente lo hizo y lo probó. Sospecho que sí, pero no hay documentación al respecto” dice Ristoph sobre el descubrimiento.
Aunque esté sea mucho más lento de lo que planteaba el inventor, el diseño de la válvula sigue siendo útil especialmente porque como no tiene partes móviles no necesitaría mantenimiento.
El equipo de investigadores creen que el diseño podría aprovechar las vibraciones en los motores y otras maquinarias para bombear combustible, refrigerantes, lubricantes, al igual que otros gases y líquidos.
“Imagínese si tuviera esos sistemas de bomba de fluido que básicamente tomaran la vibración del motor que está allí de todos modos y lo hicieran circular. No tiene partes móviles. No hay nada que romper “, concluye Ristroph.