Una vez más el telescopio Webb lo hizo y nos comparte una imagen directa de un mundo distante. Esta apreciación es la primera en su tipo, según los astrónomos de la NASA.
Se trata de un exoplaneta gigante y gaseoso, con superficie rocosa, por lo que no podría ser habitable, de acuerdo con un informe de la NASA.
La imagen fue visualizada a través de cuatro filtros de luz diferentes; muestra cómo la poderosa mirada infrarroja de Webb puede capturar fácilmente mundos más allá de nuestro sistema solar, señalando el camino hacia futuras observaciones que revelarán más información que nunca sobre exoplanetas.
El exoplaneta HIP 65426 b se muestra en diferentes bandas de luz infrarroja. Estas imágenes se ven diferentes debido a las formas en que los instrumentos Webb capturan la luz.
Tiene entre seis y 12 veces la masa de Júpiter, y estas observaciones podrían ayudar a reducirlo aún más. Es joven como los planetas: entre 15 y 20 millones de años, en comparación con nuestra Tierra de 4.500 millones de años.
¿Cuáles instrumentos usa el Webb para captar la imagen?
- Un conjunto de máscaras dentro de cada instrumento, llamado coronógrafo, bloquea la luz de la estrella anfitriona para que se pueda ver el planeta.
- Las formas de barra en las imágenes de NIRCam son artefactos de la óptica del telescopio, no objetos en la escena.
“Este es un momento transformador, no solo para Webb sino también para la astronomía en general”, dijo Sasha Hinkley, profesora asociada de física y astronomía en la Universidad de Exeter en el Reino Unido, quien dirigió estas observaciones con una gran colaboración internacional.
Webb es una misión internacional dirigida por la NASA en colaboración con sus socios, la ESA (Agencia Espacial Europea) y la CSA (Agencia Espacial Canadiense).
Tomar imágenes directas de exoplanetas es un desafío porque las estrellas son mucho más brillantes que los planetas. El planeta HIP 65426 b es más de 10 mil veces más débil que su estrella anfitriona en el infrarrojo cercano y unas miles de veces más débil en el infrarrojo medio.
En cada imagen de filtro, el planeta aparece como una mancha de luz con una forma ligeramente diferente. Eso se debe a las particularidades del sistema óptico de Webb y cómo traduce la luz a través de las diferentes ópticas.
“Obtener esta imagen fue como buscar un tesoro espacial”, dijo Aarynn Carter, investigadora postdoctoral en la Universidad de California, Santa Cruz, quien dirigió el análisis de las imágenes. “Al principio, todo lo que podía ver era la luz de la estrella, pero con un cuidadoso procesamiento de imágenes pude eliminar esa luz y descubrir el planeta”.