Dos exoplanetas que orbitan alrededor de una estrella enana roja “contienen gran cantidad de agua”, detalló un equipo de investigación de la Universidad de Montreal.
Los astrónomos que utilizaron el telescopio espacial Hubble observaron dos exoplanetas que están constituidos por un mundo acuático y afirmaron que estos planetas, ubicados en un sistema planetario a 218 años luz de distancia en la constelación de Lyra, no se parecen a ningún planeta que se encuentra en el sistema solar.
El equipo observó los exoplanetas Kepler-138 c y Kepler-138 d con el Telescopio Espacial Hubble de la NASA y el Telescopio Espacial ya retirado Spitzer. Incluso, una nueva investigación encontró evidencias de un cuarto planeta.
“No se detectó agua directamente en Kepler-138 c y d, pero al comparar los tamaños y masas de los planetas con los modelos, los astrónomos concluyen que una fracción significativa de su volumen, hasta la mitad, debería estar hecha de materiales que son más ligeros que rocas, pero más pesados que el hidrógeno o el helio.
“Ahora hemos demostrado que estos dos planetas, Kepler-138 c y d, son de naturaleza bastante diferente y que una gran fracción de su volumen total probablemente esté compuesta de agua. Es la mejor evidencia hasta ahora para los mundos acuáticos, un tipo de planeta que fue teorizado por los astrónomos durante mucho tiempo”, explicaron.
Dichos planetas y uno más pequeño cercano a la estrella, Kepler-138 b, habían sido descubiertos previamente por el Telescopio Espacial Kepler de la NASA.
“Anteriormente pensábamos que los planetas eran un poco más grandes que la Tierra eran grandes bolas de metal y roca, como versiones ampliadas de la Tierra, y es por eso que los llamamos súper-Tierras”, explicó Björn Benneke, coautor del estudio y profesor de astrofísica en la Universidad de Montreal.
Se estima que Kepler-138c y Kepler-138d tienen aproximadamente tres veces el tamaño de la Tierra y el doble de la masa de nuestro propio planeta, pero con densidades mucho más bajas.
Además, los investigadores advierten que es posible que los planetas no tengan océanos como los de la Tierra directamente en la superficie del planeta. “La temperatura en la atmósfera de Kepler-138 d probablemente esté por encima del punto de ebullición del agua, y seguramente sea una atmósfera espesa y densa hecha de vapor en este planeta. Solo debajo de esa atmósfera de vapor podría haber agua líquida a alta presión, o incluso agua en otra fase que ocurre a altas presiones, llamada fluido supercrítico”, dijo Piaulet.