El módulo lunar Peregrine lleva instrumentos científicos de siete países, entre ellos una “ambiciosa” misión mexicana con diminutos robots para estudiar la superficie lunar.
A la 1:17 horas de este lunes 8 de enero, México hizo historia tras despegar el cohete Vulcan Centaur con la nave espacial Peregrine que llevará a ‘Colmena’ a la Luna.
Los robots, que incluyen esta misión espacial, han sido desarrollados por el Laboratorio de Instrumentación Espacial del Instituto de Ciencias Nucleares (LINX-ICN), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“Con este proyecto, la UNAM se ha vuelto pionera en el desarrollo de micro-robótica espacial, la cual es un área tecnológica que tendrá gran auge en los próximos años, cuando se impulse la minería espacial”, destacó la máxima Casa de Estudios en sus redes sociales.
Según la UNAM, este despegue fue uno de los tantos retos a los que se enfrentó y enfrentará la misión, por lo que los próximos serán la puesta en órbita y el alunizaje, este último se tiene se previsto que ocurra el próximo 24 de febrero de 2024.
Se trata de exploradores de unos 12 centímetros de diámetro y de menos de 60 gramos de peso que forman parte del proyecto Colmena, la primera misión lunar de México.
Cada uno de los robots cuenta con ruedas, sensores y computadoras a bordo que les permitirán la exploración lunar y de la minería espacial.
Las dimensiones de éstos robots los colocarán a escasos centímetros de la superficie de regolito lunar, un polvo formado por granos sumamente finos, irregulares y abrasivos.
“Su estudio permitirá analizar la factibilidad de construir estructuras sobre superficies planetarias utilizando enjambres de robots auto-organizados”, detalla la universidad mexicana.
La Agencia Espacial Mexicana (AEM) ha señalado que este proyecto hará historia y es el primero de su tipo en Latinoamérica.
Con información de EFE